Si buscamos unos auriculares gaming, tenemos muchas opciones en el mercado, pero todas se centran en una o dos plataformas. Los Logitech Astro A50 X, con un precio de 399 euros, ofrecen compatibilidad para absolutamente todos los sistemas.

Cualquier ‘gamer’ que se precie sabe que es muy importante elegir la mejor plataforma para disfrutar de sus juegos. Consolas como la PlayStation 5 y la Xbox Series X ofrecen una experiencia estandarizada y acceso a exclusivas; mientras que montar un ordenador gaming puede ser más caro y complicado, pero ofrece una experiencia de alta calidad.

Pero los verdaderos jugadores, los auténticos, saben que la plataforma es algo secundario: lo importante son los juegos. Por eso, no es de extrañar que la mayoría tenga más de una plataforma, ya sea una consola y un móvil, un PC y una consola, o una combinación de todas. Y eso abre la puerta a muchos problemas, como por ejemplo, ¿qué pasa si quiero conectar mis auriculares?

Los auriculares gaming para todo

Hay muchos auriculares gaming en el mercado, pero la mayoría se centra en una o dos plataformas. Los hay compatibles y certificados para Xbox o para PlayStation, o los que se centran en los jugadores de PC, o incluso los hay que sólo ofrecen una conexión Bluetooth para el móvil o para la consola portátil.

La fragmentación del mercado tiene la culpa; cada plataforma sigue sus propios estándares y es muy difícil (y caro) para los fabricantes adaptarse a cada una. Pero ahora viene una compañía que ha decidido dar el paso que nadie ha dado, crear unos auriculares gaming para todas las plataformas, que son capaces de pasar de una a otra como si fuesen la misma.

Logitech ha sido la que se ha atrevido con semejante tarea, más propia de uno de los trabajos de Hércules; y la ha superado con la misma ingenuidad y valentía, aunque el resultado no siempre sea bonito. Los Logitech G Astro A50 X son los auriculares gaming que prometen unificar todas tus consolas, ordenadores y móviles.

Es obvio que no ha sido sencillo. Los ingenieros de Logitech han tenido que tomar algunas decisiones difíciles, pero lo han conseguido gracias a un concepto muy inteligente: una base de carga que al mismo tiempo unifica todas las conexiones en un solo lugar.

Una conexión para unirlas a todas

La base de carga incluida con los Astro A50 X hace mucho más que recargar los auriculares cuando los dejamos encima; también sirve de puente entre los auriculares y nuestros dispositivos. En la parte trasera, tiene nada menos que 3 puertos USB y 3 puertos HDMI, para aceptar las conexiones de todos nuestros aparatos y dar energía al dispositivo; la base se encarga de gestionar y mezclar el sonido proveniente de cada fuente y enviarlo a los auriculares de manera inalámbrica.

No es una solución perfecta, y es algo complicada. Nunca es buena señal cuando los propios creadores de un producto tienen dificultades para explicar qué es lo que puede hacer; y eso es lo que ocurrió durante la presentación de los Astro A50 X a la que EL ESPAÑOL – El Androide Libre tuvo oportunidad de acudir. Lo primero que te encuentras cuando abres la caja de los auriculares es un manual con complicados esquemas de instalación, algo que me dio más miedo de lo que debería.

Hay muchas oportunidades para que algo salga mal durante el proceso de instalación, pero una gran ayuda son los vídeos que Logitech ha publicado en YouTube para tener una guía visual de lo que hay que hacer. Lo importante es tener los cables HDMI de las consolas a mano y usar la base y los cables incluidos tal y como se indica en el manual; por último, es necesario un cable HDMI adicional para conectar la base al televisor. La base también funciona como puente entre las consolas y el televisor, así que no necesitaremos nada más para conectar dos consolas diferentes al mismo puerto HDMI, por ejemplo.

La buena noticia es que, una vez que conectas todos los cables y configuras todo correctamente, no vas a tener que volver a hacerlo; todo funcionará como la seda y de manera automática, por lo que puedo decir que ese proceso de instalación inicial merece la pena. Y es que estos auriculares nos permiten usar tres plataformas al mismo tiempo y sin tener que pensar cuál es cual.

Logitech llama a este sistema Playsync, y permite conectar sistemas Xbox, PlayStation, PC/Mac y Bluetooth y usarlos de manera indistinta. Un simple toque en un botón de los auriculares nos permite cambiar de un sistema a otro, sin necesidad de hacer nada más; así que el tiempo que ahorras en este proceso compensa con creces la instalación inicial.

La facilidad de uso queda patente con el diseño ergonómico y los controles de los Astro A50 X. Son unos cascos muy ligeros y que apenas se notan en la cabeza, y he podido usarlos durante largas jornadas de trabajo y juego sin muchos problemas.

Es sorprendente lo que Logitech ha conseguido con Playsync; ha unido plataformas rivales y muy diferentes entre sí para obtener una experiencia transparente para el usuario. La base se encarga de todo el trabajo sucio de llevar el vídeo y el audio al televisor y a nuestros auriculares; para esto último, usa la tecnología Lightspeed que hemos visto en otros productos de Logitech, que ofrece baja latencia y alta calidad de sonido. Por último, también tienen Bluetooth integrado, para conectarlo a nuestro móvil u otro dispositivo que no sea necesariamente compatible con la base de carga, como la Nintendo Switch.

Gran sonido con tecnología de grafeno

Hablando del sonido, la base de carga no es el único elemento de gama alta de los Astro A50 X. Estos auriculares usan los ‘drivers’ de grafeno PRO-G Graphene de Logitech, la solución más avanzada de la compañía hasta ahora, y un auténtico competidor contra nuevas tecnologías como los ‘drivers’ planares magnéticos que ya estamos viendo en este rango de precios.

El grafeno en su día fue uno de esos ‘materiales milagrosos’ del que todo el mundo hablaba, y aunque haya pasado algo desapercibido ahora que se está usando de manera práctica, su utilidad es innegable. Es algo notable en estos auriculares, que ofrecen un sonido muy nítido comparado con unos auriculares de diafragma tradicionales.

Los Astro A50 X destacan por la nitidez de su sonido, especialmente en las frecuencias medias/altas. Las voces están representadas de una manera que ya le gustaría a muchos auriculares para audiófilos, y ese es el rango que más me ha sorprendido, sin duda alguna. También ayuda mucho que el perfil de sonido sea muy neutral, lo que ayuda inevitablemente a que ese rango esté bien representado. En cambio, con los agudos acierta tantas veces como falla, especialmente en los extremos, aunque no son malos ni mucho menos.

Como era de esperar en un producto gaming, los graves son un punto fuerte en estos Astro A50 X, aunque sospecho que es más el resultado del ‘tuneo’ de Logitech que una propiedad de los ‘drivers’, algo que se puede comprobar cambiando la ecualización del sonido usando la app G Hub de Logitech.

Lo que más me ha sorprendido del sonido de los Logitech Astro A50 X es cómo el sonido te rodea. El efecto envolvente está mucho mejor conseguido de lo habitual, y es algo que se nota sólo con escuchar música en estéreo; me sorprendí a mí mismo completamente atrapado por composiciones orquestales y por Paranoid de Black Sabbath, algo que sólo suelo notar con auriculares dedicados en exclusiva a música.

Y el efecto es igual de impactante en videojuegos, tal vez incluso más. Las explosiones realmente se notan de fondo, y los sonidos ambientales son capaces de meternos mejor en la escena que estamos jugando (algo especialmente bueno para juegos de terror). Aunque técnicamente son unos auriculares estéreo, son compatibles con Dolby Atmos y ofrecen un rendimiento espectacular en contenido envolvente.

En cambio, creo que el aislamiento es el verdadero problema relacionado con el sonido, porque es inexistente tanto para un lado como para otro. Los auriculares son incapaces de tapar el ruido externo, algo especialmente molesto si tenemos un ordenador con ventiladores ruidosos cerca; y me sorprendí cuando mi móvil fue capaz de reconocer la música que estaba escuchando por los auriculares, sin tenerlos conectados: el micrófono del móvil era capaz de escuchar el sonido que salía por los cascos, sin subir mucho el volumen.

Mención especial para el micrófono integrado. Logitech por fin ha echado el resto en este apartado, y el resultado es una voz nítida y natural, que no parece ser grabada en una caja o desde la otra punta de la habitación. Desde la app G Hub podemos modificar la ‘puerta de ruido’, ideal si vamos a jugar de noche y queremos susurrar.

Lamentablemente, Logitech no ha implementado su tecnología Blue Voice para ajustar el sonido del micrófono y aplicar reducción de ruido, algo que sí tienen otros de sus modelos. Así que lo que ganamos en ‘hardware’ lo perdemos en ‘software’ en lo que respecta al micrófono.

¿Me los compro?

Los Logitech G Astro A50 X son los auriculares gaming definitivos si tenemos varios dispositivos para jugar; pero eso no significa que sean ideales para todos los jugadores. El precio de 399 euros que hemos comentado al principio del análisis probablemente habrá echado para atrás a la mayoría de los interesados, y no es para menos; es una cifra que no habíamos visto hasta ahora en unos ‘simples auriculares’, pero no es menos cierto que no tienen nada de ‘simples’.

Estamos hablando de unos cascos que cuestan casi lo mismo que las consolas a los que podemos conectarlos; es una inversión que comprensiblemente no todo el mundo podrá hacer. Pero si lo miramos fríamente, es el chollo del siglo; no tenemos que comprar un par de auriculares para cada sistema por separado, algo que sin duda alguna nos costaría mucho más si buscamos las mismas funciones y la misma calidad de sonido.

En otras palabras, los Logitech G Astro A50 X tienen mucho sentido si ya tenemos dos consolas y un ordenador gaming y estamos hartos de cambiar de un auricular a otro o de conectar y desconectar los que tenemos. Conforme nos alejamos de esa situación ideal, este modelo es menos recomendable, y es más lógico buscar alternativas. La propia Logitech ofrece los G Pro X 2, que también tienen auriculares de grafeno y la conexión Lightspeed, por sólo 289 euros; o podemos optar por otra marca, como los Razer BlackShark V2 Pro por 229,99 euros con un diseño muy cómodo y mucha versatilidad.