Todos los años Xiaomi renueva su propuesta de pulseras inteligentes. Este año no hemos visto sólo un modelo, sino tres. Primero llego a España la Xiaomi Smart Band 9 y luego supimos de la existencia de la Xiaomi Smart Band 9 Active. Ahora le toca el turno a la Xiaomi Smart Band 9 Pro, que hemos podido probar en EL ESPAÑOL - El Androide Libre.
Este dispositivo no deja de ser una pulsera de cuantificación, pero por tamaño y prestaciones roza lo que se espera que haga un reloj inteligente. Al menos uno de los sencillos, que no tiene un sistema operativo avanzado. Y dado que su precio es sustancialmente menor, esto es importante.
La Xiaomi Smart Band 9 Pro tiene un precio en España de 69,99 euros, quizás algo alto para una pulsera pero desde luego bajo para un reloj. Teniendo en cuenta el tamaño y brillo de su pantalla y que tiene funciones avanzadas como GPS, no parece que Xiaomi se haya excedido en este apartado.
Una pulsera grande
Lo primero que llama la atención de este producto es su tamaño. Cuando la gente la ve su pantalla de 1.74 pulgadas hace que parezca un reloj. Es cierto que la construcción no tiene los mejores materiales, pero no se siente mal al tacto y es capaz de camuflarse con cualquier combinación de ropa, sobre todo porque podemos cambiarle las correas, aunque no usa una conexión estándar, sino una propietaria.
El marco es del mismo color que la pulsera que se incluye en la caja y hay tres diferentes. En la unidad que nos ha cedido Xiaomi unas semanas el color es negro, y quizás es el menos vistoso pero también el más sobrio. Lo hemos usado con la correa de silicona que viene en la caja tanto para ir a entrenar y en el día a día como para ir algo más arreglados y en ningún momento nos ha dado la sensación de que su estética chocara.
Lo que sí hemos echado de menos, estando acostumbrado a ello en los relojes, es un botón físico. Es una de las grandes diferencias que se mantienen entre relojes y pulseras. Se puede encender la pantalla girando la muñeca o tocando la pantalla, pero aún así la conveniencia del botón es mayúscula.
Fluidez y deporte
Las pulseras inteligentes no son dispositivas especialmente potentes, ni lo necesitan. Su principal cometido es tener una interfaz que funcione de manera fluida y con características que no den problemas. Esta lo cumple.
Hemos estado entrenando con la Xiaomi Smart Band 9 Pro tanto en interiores como en exteriores y, para el precio que tiene, nos ha dado unas cifras muy correctas. Incluso hemos podido comparar la cuantificación de las pulsaciones comparándola con una cinta de andar profesional y el desfase era de entre 1 y 2 pulsaciones en el rango de las 120 ppm. También hemos usado el GPS para hacer caminatas en exteriores, lo que nos permite no llevar el móvil encima si no queremos.
Y aquí es donde brilla, nunca mejor dicho, la pantalla. Uno de los mayores cambios con respecto a los modelos anteriores es el brillo de la pantalla, que es de 1.200 nits. Además, tiene control automático, lo que ha permitido su uso en todo momento sin tener que preocuparnos de si se veía bien o no lo que mostraba la pulsera o de buscar una sombra.
Dispone de un abanico enorme de detección de ejercicios, incluyendo algunos de natación dado que tiene resistencia al agua, como era de esperar. También podemos usar la pulsera como disparador remoto de la cámara incluso en móviles que no son de Xiaomi. En cuanto a los sensores, se han mejorado los que calculan el ritmo cardíaco y la saturación de oxígeno en sangre, y se nota. Además, el motor de vibración es más fuerte y es prácticamente imposible obviar una notificación.
Se echa de menos la inclusión de NFC para poder pagar con el dispositivo. Xiaomi tiene esta tecnología en relojes que se venden en España y que no cuestan mucho más, como el Xiaomi Watch S3, pero en las pulseras aún no ha optado por implementar.a
Para el control de la pulsera se usará la aplicación Mi Fitness, que es el reemplazo de la antigua Mi Fit. Es una app que funciona de manera muy correcta, que no obliga a tener una notificación permanente en el móvil y que, en general, nos permite ver el histórico de datos que arroja la pulsera. Una pega es que el sistema sigue avisando de cada mensaje en un grupo de WhatsApp silenciado, con el texto "Comprobando si hay mensajes nuevos en WhatsApp", algo que es extremadamente irritante.
Gran autonomía
Otra de las mejoras de esta pulsera es la autonomía. Con un uso normal de notificaciones, cuantificación del deporte y puntualmente de alguna ruta breve con GPS, hemos gastado un 5% de batería diario. Esto arroja unos 20 días de autonomía, cerca de las tres semanas que promete la empresa.
Obviamente si usamos mucho más las notificaciones, si hacemos rutas de mucho más tiempo por el monte o si estamos modificando cosas en la interfaz constantemente, es normal que la autonomía baje. Pero aún así esta es sin duda una de las funciones estrella de este producto.
¿Me la compro?
La Xiaomi Smart Band 9 Pro es una evolución continuista de su antecesora. Está claro que teniendo el modelo del año pasado no tiene sentido cambiar. Sin embargo, si no tenemos ningún wearable de muñeca, si buscamos un producto fiable y de precio ajustado pero no queremos renunciar al GPS o a la gran pantalla, esta es una gran opción. Es importante recalcar la ausencia de NFC, por si queremos pagar sin sacar ni el móvil ni la cartera del bolsillo.
No es de las pulseras más baratas que hemos analizado, ni Xiaomi lo pretente, pues para eso están las otras Xiaomi Smart Band 9. Pero sí que es lo mejor que puedes comprar sin dar el salto a los relojes, con lo que eso implica de aumento de precio y de pérdida de autonomía.