Ayer nos hicimos eco de como la Google Nexus 10 iba a incorporar el último procesador de la familia Exynos, el 5250, un chipset fabricado por Samsung y basado en Cortex A15 que está dando mucho que hablar en los últimos días debido a su sorprendente rendimiento.
Y es que este SoC está rompiendo todos los benchmarks que se le ponen por delante, a pesar de ser de solo dos núcleos. Si ya nos sorprendía el Qualcomm Snapdragon S4 Pro que va a incorporar el Nexus 4, este Exynos nos va a dejar con la boca aún más abierta.
Como vemos en la tabla superio, el Exynos 5250 barre por completo a los que, hasta ahora, eran los procesadores más potentes del mercado. Entre ellos encontramos los famosos Nvidia Tegra 3, Qualcomm Snapdragon S4 y Exynos 4412, los cuales han sido incorporados en dispositivos como el One X, One S y Samsung Galaxy S3 respectivamente.
Otro ejemplo de la potencia de este Exynos 5250 es el último benchmark al que han sometido un prototipo filtrado de la Nexus 10 (imagen de arriba). En él, teniendo en cuenta que la resolución es mayor (algo que lastra al procesador) y que la optimización no es del todo buena (aún es una versión en desarrollo de Android), consigue equiparar en rendimiento a los actuales S4 Pro y Exynos 4 que montan el LG Optimus G y el Samsung Galaxy S3 respectivamente. Esto nos deja bien claro la gran potencia que puede otorgar este SoC.
¿Qué tiene por dentro?
Cada dos o tres años, ARM presenta una nueva arquitectura. En este caso, la más reciente es Cortex A15, que es en la que está basada este Exynos 5250. Según el vicepresidente de ARM, esta arquitectura es la más importante de la historia de la compañía, ya que es capaz de equiparar en potencia a las soluciones de escritorio, unas palabras que se están demostrando con creces en los últimos días.
Además de esto, este Exynos 5250 también está pensado para ser eficiente energéticamente. Según Samsung, el consumo respecto a los Exynos 4 se verá reducido en un 40 o 50%, que es una mejora sobresaliente. Esto es posible gracias a que el Exynos 5250 está fabricado en una arquitectura de 32 nanómetros, lo que reduce considerablemente el consumo energético. Esta fabricación ha sido posible gracias a una nueva tecnología que Samsung ha denominado como High-k Metal Gate.
En el apartado de la eficiencia energética hay soluciones que a priori parecen ser mejores, como los Qualcomm Snapdragon S4 y S4 Pro, los cuales están fabricados en 28 nanómetros. No obstante, la diferencia entre el Exynos 5250 y el S4 Pro no debe de ser tan grande como si ha sido entre los 45 nanómetros y la actual generación de 32 nanómetros.
También debemos de citar que este Exynos 5250 de dos núcleos a 1.7 GHz está acompañado de una GPU Mali 604-T de cuatro núcleos, un chipset gráfico que puede proporcionar gráficos equiparables a las gráficas integradas de los equipos de escritorio. De hecho, soporta estándares como Microsoft DirectX, los cuales solo nos encontramos en los ordenadores con Windows.
Si la comparamos con la GPU de otros dispositivos actuales como el A6X del iPad de 4ª generación, esta Mali 604-T consigue superar en un 40% el rendimiento de sus rivales, obteniendo hasta 72 GFLOPS (frente a los 50 del A6X del iPad). Así mismo, esto supone una mejora del cuádruple si lo comparamos con la actual Mali 400 MP que monta el Samsung Galaxy S3.
Y por último, este Exynos 5250 cuenta con soporte para memoria LPDDR3 de doble canal de hasta 800 MHz, es decir, que soporta memorias RAMs más rápidas que las que actualmente estamos viendo en los móviles y tablets, lo que significa una mejora sustancial en el rendimiento del dispositivo que lo incorpore. Además de esto, el Exynos 5250 también soporta estándares como USB 3.0, HDMI 1.4 o SATA 6 Gbps.
Futuro de los chipsets ARM
Hasta ahora los chipsets ARM se han limitado a soluciones para móviles y tablets, pero cada vez están consiguiendo lograr potencias más similares a soluciones de escritorio como las que ofrecen Intel y AMD. De hecho, este Samsung Exynos 5250 ha sido incorporado en el último Samsung Chromebook, un portátil de 11.6 pulgadas que corre Chrome OS en su interior.
Así mismo, este procesador se va a incluir dentro de la futura Nexus 10, la cual se presupone que va a contar con una resolución de 2600 x 1900, una auténtica bestialidad que necesita ser movida por un procesador muy potente como este.
En conclusión, parece que cada día está más cerca el momento en el que las soluciones ARM pasarán a sustituir los actuales procesadores de x86 y x64.
Fuente | AndroidWorld