Todos sabemos que los teléfonos chinos cada vez tienen más éxito. Unos precios increíblemente bajos para terminales muy competitivos son una brisa fresca en un entorno de smartphones por 600€. Pero, ¿como se consiguen esos precios? Si bien es cierto que tienen menor gasto en marketing que compañías como Samsung y Sony, ¿es esa la única diferencia? Al parecer no es así según Karel De Gucht actual Comisario de Comercio Europeo que en una entrevista a Reuters acusa a ZTE y Huawei de imponer precios predatorios en sus productos, eliminando así cualquier competencia y haciendo imposible un justo y libre mercado.
Los smartphones de empresas chinas, aunque no tienen tanta presencia en medios, se han ido filtrando en el mercado europeo llegando a ocupar hasta un cuarto de este, lo que en ventas equivale a cerca de 1000 millones de euros. Eso no sería problema si no fuese porque, según la comisión de comercio europea, esos terminales están subvencionados por el propio gobierno chino para poder venderse a un precio por debajo de la competencia. Esta no es una práctica desconocida a otros países (BlackBerry recibió una cuantiosa suma de Canadá para la venta de su Z10 fuera de las fronteras) pero no por ello representa un peligro menor para el mercado europeo.
Si bien las acusaciones de precios predatorios son públicas (son declaraciones de una entrevista a Reuters), no se ha empezado ninguna investigación oficial, ya que cualquier movimiento de ese tipo afectaría a las relaciones entre Europa y China. Por contra Estados Unidos ya mantiene una vigiladas ambas compañías. Este acto que empezó oficialmente por seguridad nacional fue aprovechado para favorecer a las compañías americanas. Las dificultades impuestas a ZTE i Huawey llegaron hasta tal punto que Huawei decidió abandonar el mercado estadounidense.
A las de Karel De Gucht, Huawei ha respondido:
«In Europe and in all markets, Huawei always plays fair and we win business and trust from our customers through our innovative technology and quality service, rather than via pricing or subsidies,»
En español
«En Europa como en todos los mercados, Huawei juega limpio y se gana el mercado y la confianza de los clientes con tecnología innovadora y calidad de servicio, no con precios ni subsidios.»
Respecto a la situación actual de la investigación, De Gutch afirma que está «la investigación está peparada pero en pausa» a la espera de que las negociaciones que mantienen con China den fruto (de momento han tenido tres reuniones sin éxito) y se solvente sin necesidad de acciones extra: «No quiero elaborar en las sanciones que se establecerían. China conoce nuestros procedimientos también como nosotros. Saben cuales son nuestras herramientas» afirma De Gutch. Este tipo de acciones las llevarían a cabo las comisiones europeas sin el soporte oficial de las compañías telefónicas europeas, que no quieren arriesgarse a represalias de China (no es un país que tenga problemas en cerrar el mercado a una empresa concreta).
En conclusión de no arreglarse las cosas y establecerse una investigación podemos encontrarnos con dos situaciones:
- Las acusaciones son bien fundadas y las compañías están siendo beneficiarias de subsidios chinos. En este caso la Comisión de Mercado pondría trabas o incluso impediría el acceso de estas compañías (y seguramente muchas otras) a los mercados de la Unión Europea, que actualmente es un mercado vital para china en este campo.
- Las acusaciones no encuentran fundamento. En este caso no se llevarían a cabo acciones contra ZTE ni Huawei desde la Comisión de Mercado (de hecho tal vez se les abriría más el mercado a modo de «disculpa»), aunque para los usuarios significaría la seguridad de que algunas de las empresas con más renombre hinchan sus precios.
Una situación complicada entre potencias que afecta tanto a empresas como a consumidores. Sin duda los usuarios deseamos la mejor relación calidad precio posible, pero es importante que se asegure la competencia leal y controle este tipo de (supuestos) «ataques económicos». De momento solo son acusaciones y negociaciones, así que toca esperar a ver como se cierran las cosas.
Fuente | Reuters