Android Auto fue uno de los productos presentados con mayor pompa en la pasada Google I/O. Por ahora se trata de un añadido que necesita de un smartphone para ser usado, pero los de Mountain View estarían trabajando en equiparlo directamente en el vehículo.
Sería un gran avance para el sistema de Google, que se liberaría de la esclavitud de necesitar un teléfono para funcionar, evitando así problemas como que todo deje de funcionar en el momento en el que la batería del móvil muera. Además, daría acceso a Google a datos directos del coche como el nivel de gasolina y otros datos técnicos, ampliando así su utilidad para el conductor y, por supuesto, alimentar su negocio de recolección de información, que tendría nuevos datos cada vez que encendiéramos el motor sin necesidad de que conectásemos el teléfono.
Android M, con Mercedes, Volkswagen o Honda
Según Reuters, Google se estaría preparando este movimiento junto a su próxima versión de Android, Android M, dentro de algo menos de un año. Sin embargo, para eso los de Mountain View deberán superar ciertas reticencias por parte de los fabricantes, que podrían no ver claro atarse de manera tan intima a un sistema operativo.
Las marcas buscan diferenciarse unas de otras y estar seguras de que Android Auto es lo suficientemente estable como para no suponer ningún problema para la seguridad del vehículo o de la privacidad de su conductor.
Mercedes, Hyundai, Mazda, Nissan, Renault, Seat, Volvo, Volkswagen o Honda son algunos de los fabricantes que ya han llegado a un acuerdo con Google y se espera que lancen sus primeros modelos con Android a principios de 2015.
De lograr este movimiento, Android Auto se convertiría en la figura dominante en el terreno de los coches inteligentes, seguramente uno de los mercados más apetitosos para la compañía y permitiría ofrecer al usuario una experiencia independiente de su teléfono más completa, más allá de una pantalla que proyecte las aplicaciones de tu teléfono, y para ellos supondría un caramelo de información que sería la guinda para su negocio.
Vía Reuters