Nepal no había ni siquiera recuperado la respiración tras el devastador terremoto del pasado 25 de abril que arrancó más de 8.000 vidas cuando ha vuelto a ser golpeado por un nuevo sismo de 7,4 en la escala de Richter. La humanidad ha puesto un hombre en la Luna y ha mandado sondas hasta las fronteras del Sistema Solar, pero por desgracia todavía no somos capaz de predecir algunos movimientos de nuestro planeta que matan a miles de nuestros iguales.

Sin embargo, a pesar de esta incapacidad para predecir con suficiente antelación terremotos, tsunamis o erupciones volcánicas, la tecnología puede ayudar y mucho en caso de desastres naturales y los smartphones pueden jugar un papel fundamental.

Safety Check de Facebook, avisa a tus contactos de que estás bien

En los posteriores al terremoto, Facebook y Google cobraron una cierta importancia en la búsqueda de víctimas. Facebook activó su Safety Check, un sistema desarrollado tras el tsunami que asoló la costa japonesa en 2011. Así es como funciona: la red social activa el sistema cuando ocurre un desastre natural. Determinará tu localización basándose en tres criterios: la ciudad que indiques en tu perfil, tu última localización en caso de que tengas activada la opción ‘amigos cercanos’ y la ciudad desde la que estés usando Internet. Si estás en la zona, te llegará una notificación push preguntándote si estás bien, puedes confirmar que lo estás y automáticamente Facebook informará a tus amigos de tu estado, o puedes decir que no estás en el lugar.

Según los datos de Facebook, unos 4.4 millones de nepalies son usuarios de la red social (sobre una población de unos 30 millones), y para hacer uso de esta herramienta es necesario, además, un smartphone y la penetración de estos dispositivos en el país es, por desgracia, bajo. Sin embargo, aunque quizá en esta ocasión haya servido más para turistas que para la población local, el Safety Check de Facebook es un gran ejemplo de un buen uso de la geolocalización y que a buen seguro -por desgracia- tendrá más ocasiones de demostrar su valía.

Person Finder de Google, una gran base de datos para localizar a tus conocidos

Google tampoco se quedó de brazos cruzados y activó su Person Finder, que ya funcionó tras el paso del Tifón Yolanda por las Filipinas en 2013 o los atentados de la Maratón de Boston ese mismo año. Esta herramienta funciona básicamente como una base de datos colaborativa en el que cualquiera puede acceder e informar del su propio estado o de aquellos cuyo paradero conoce, además de facilitar datos para contactar con esa persona. Google organiza toda la información de forma que sea fácil de encontrar buscando simplemente el nombre del desaparecido. Durante la crisis nepalí, Google ha manejado información de cerca de 8.000 personas.

La gran ventaja que tiene el Person Finder de Google es que no necesita que la persona tenga un smartphone y ni siquiera conexión a Internet, ya que cualquiera puede incluir información de terceros, lo cual hace que, sobre el papel, tenga un alcance potencial mayor que el Safety Check de Facebook.

Otro sistema usado en Nepal para ayudar a las víctimas es el Humanitarian OpenStreet Map, un sistema similar a Google Maps que cualquier persona puede editar añadiendo información sobre los daños para facilitar el trabajo de los equipos de rescate. Incluso la NASA ha desarrollado un sistema que permite detectar supervivientes atrapados bajo metros de escombros. El sistema se llama Finder y ha sido utilizado por primera vez en Nepal, salvando cuatro vidas.

Informando del desastre con un smartphone

Además, los smartphones en un desastre natural pueden ser de especial ayuda a los periodistas desplazados a estos lugares para que den a conocer la situación y recuerden al resto del mundo que hay gente que necesita ayuda. El reportero de BBC Radio Nick Garnett explica en un artículo publicado por el Huffington Post explica como informó de la desastrosa situación de Nepal usando su teléfono inteligente para retransmitir imágenes en directo.

Por su parte, la BBC utilizó Viber y sus chats públicos para informar a la población y ofrecer guías de actuación, como no creer bulos que aseguraban que había previsto un terremoto para una determinada hora o pedir a la gente que se mantuviese alerta ante la posibilidad de réplicas al terremoto principal. La cadena ya había utilizado aplicaciones como Whatsapp o WeChat de forma similar durante la epidemia de Ébola en África.

Pero además de las vidas, buena parte del extraordinario legado cultural del país ha sido destruido, pero de nuevo, los smartphones pueden ayudar a reconstruirlo o, como mínimo, tratar de salvar una parte. Una aplicación está en desarrollo que permitirá a los excavadores, una vez empiecen las labores de reconstrucción, tomar fotos de los artefactos encontrados, catalogarlos y ayudar a los arqueólogos locales a clasificar lo que se pueda salvar.

Internet debe llegar más lejos para ayudar a las personas

Por desgracia, buena parte de este tipo de desastres ocurren en países en vías de desarrollo, donde los smartphones y teléfonos móviles en general todavía no tienen la presencia que pueden tener en Europa o Estados Unidos. Por ejemplo, Nepal tenía en 2014 77 líneas móviles por cada 100 habitantes frente a las 107 de España, si bien es destacable el rápido crecimiento, en 2010 tenía únicamente 34 líneas por 100 habitantes.

En este aspecto cobran importancia programas como Android One de Google o Internet.org de Facebook que tienen como objetivo llevar extender el uso de Internet en todo el mundo. Aunque en ambos casos el interés que se esconda tras la iniciativa sea la de expandir su número de usuarios, y aunque tengan un lado oscuro, queda claro que un mayor número de teléfonos inteligentes puede ser una enorme ayuda en caso de una situación de estas características.

Solidaridad a un dedo de distancia

Pero además de ayudar a localizar a las víctimas o a facilitar información a los supervivientes, Internet también facilita la soliradidad. El botón para donar dinero de Facebook recaudó cerca de 17 millones de dólares que ayudarán a las víctimas del terremoto a través de International Medical Corps, mientras que LinkedIn se alió con Network for Good para recaudar fondos, además de colaborar en la búsqueda de expertos en la zona que pudiesen colaborar en el rescate. También Line, una aplicación que nació a la sombra del tsunami de Japón, puso a la venta una serie de stickers cuyos beneficios irán directos a la ayuda a Nepal a través de la Cruz Roja. Google, que perdió a uno de sus ingenieros -Dan Fredinburg- en el terremoto, donó un millón de dólares, y Apple activó una opción para donar dinero a la Cruz Roja a través de iTunes (no solemos hablar de Apple en este blog, pero estas cosas deben explicarse).

Los smartphones e Internet nos han dado una cantidad enorme de posibilidades que hace sólo unos años eran imposibles. Muchas son completamente banales, como poder mirar fotos de la fiesta de anoche en Facebook desde el autobús, otras son útiles, otras son realmente útiles, como poder acceder a cualquier información en tiempo real. Pero cualquier utilidad que le podamos dar a nuestro teléfono queda pequeña cuando posibilitan la posibilidad de salvar una vida o de aliviar a quienes sufren por sus allegados haciéndoles saber que estos están bien. Y quién sabe, igual un día el avance de la ciencia y los smartphones pueden llegar a predecir los terremotos y evitar tragedias como la de Nepal.