¿Estás harto de que se arañe la pantalla de tu smartphone o tablet? Un equipo de investigadores británicos podría tener la solución con un nuevo material que se repara sólo, aunque antes serán los aviones y las uñas los que disfruten de sus beneficios.
Por mucho Gorilla Glass o Dragontrail que pueda tener nuestro smartphone, y hablando mal, es una putada que la pantalla se termine arañando sin remedio alguno. Todos soñamos con pantallas que sean capaces de repararse por sí mismas, que no nos tengamos que preocupar por esos pequeños arañazos que se pueden generar en un uso diario, y puede que la solución esté mucho más cerca de lo que pensamos.
Esto de la química es un mundo precioso, porque ha sido un químico el que ha presentado este invento ante la Royal Society londinense: Duncan Wass ha sido el cabeza de investigación en la Universidad de Bristol, y afirma que la inspiración se encuentra en nosotros mismos, los seres humanos. Cuando nos herimos, sangramos hasta que el cuerpo termina por curarse por sí mismo, algo a lo que ya estamos acostumbrados.
Estas pantallas que se reparan solas hacen exactamente lo mismo: cuando se crea el arañado, millones de esferas microscópicas se rompen y forman un líquido que forma una nueva capa. Esta nueva capa se endurece como el pegamento gracias a una reacción química, y el resultado en nuestra pantalla es que se ha recuperado del arañazo, rozando la perfección.
Este invento fue diseñado en un principio para reparar en vuelo las alas de los aviones que sobrevuelan los cielos todos los días, pero no sólo aspira a revolucionar la industria aeroespacial: ya hay varias industrias que le han visto potencial al invento, y L’Oreal quiere crear un esmalte de uñas que se repare sólo. Pero, como es obvio, nosotros nos centramos en lo que nos toca, porque contar con pantallas que se reparan solas sería una salvación para muchos.