Si atendemos al mundo del cine, una de las películas con mayor popularidad de todos los años es regreso al futuro. En ella, el protagonista viaja al futuro, que resulta ser el 21 de Octubre de 2015, el cual es exactamente hoy.
Hemos podido comprobar que el presente dista bastante del futuro que Marty visitó, y aprovechando la coincidencia, el 21 de Octubre de 2015 será recordado como el día en que todo el mundo hizo bromas relacionadas con Regreso al Futuro, incluso Google.
Google también quiere regresar al futuro
Google es una compañía a la que le gusta meterse en todos los fregados posibles, y los viajes en el tiempo son uno de los frentes principales donde la ciencia aún no nos ha demostrado una forma posible de hacerlo. Pero la ambición de Google va mucho más allá de todo esto, y hoy conocemos una «filtración» de Project Flux, el proyecto de Google para viajar en el tiempo.
La filtración nos indica que se trata de información extremadamente confidencial, y no es para menos. Al igual que pudimos ver en la película, Google ha elegido al coche como dispositivo para viajar en el tiempo. La motivación de Google por viajar en el tiempo es un intento más de los chicos de Mountain View por hacer la información más accesible al público.
Todo es posible gracias al Flujo – o también conocido como Fluzo – una sustancia desarrollada durante años por un equipo de físicos, expertos en materiales, ingenieros eléctricos y químicos, además historiadores y filósofos. Un material tremendamente eficiente capaz de permitir a cualquier coche viajar a través del tiempo.
El dispositivo de Google es capaz de viajar hasta en 3036 años en el tiempo bajo control. No obstante, un viaje irresponsable podría derivar en un efecto mariposa que cambiase la historia de nuestro planeta para siempre. Por tanto, existirá un límite de viaje de 30 años, impidiendo que las acciones de los viajeros tengan un bajo porcentaje de repercusión en el presente, siendo un porcentaje inferior al 2,5%
Según el roadmap de Google, conoceremos al primer prototipo de forma pública el próximo 26 de octubre, realizando hasta 88 pruebas públicas de viajes en el tiempo de aquí a mediados de 2016. Algunas recomendaciones de Google nos indican que nuestro cuerpo se mantendrá a salvo de daños moleculares mientras viajamos en el tiempo, aunque nos advierten que serían necesarias unas gafas especiales para que no nos impacte la luz a la gran velocidad que toma el dispositivo. Otras consecuencias son el posible jetlag debido al cambio del campo magnético y posibles mareos, siendo recomendable tener una Pepsi a mano.
Hay que reconocerle el mérito a Google y sus empleados, por haber preparado una broma tan currada para el día de hoy, aunque considerando los recursos que Google invierte en investigación quien sabe si algún día acaban creando un proyecto para viajes en el tiempo. Si sientes interés en conocer más detalles, siempre puedes clickear aquí abajo para leer la filtración de Google.
Project Flux, el proyecto de Google para montar su propio Delorean