Si algo nos han permitido los smartphones es reducir el número de aparatos con los que vivimos a nuestro alrededor. Lo que antes podía requerirnos una pequeña habitación para almacenarlo ahora cabe en nuestro bolsillo: desde el reproductor de música hasta la cámara de video. ¿Y cuánto costaban las aplicaciones de tu móvil hace 30 años ? Pues podían superar los 800.000€. Casi nada.

Hoy no son pocas las aplicaciones que ofrecen videollamadas de forma gratuita, como pueden ser Skype o Hangouts, pero en 1982 cuando los primeros sistemas de videoconferencia llegaron al mercado su precio era astronómico. El de Compression Labs ascendía a la friolera de 250.000 dólares, que ajustando la inflación hoy serían unos 586.000 dólares – aproximadamente 527.600€-, y es probablemente el dispositivo más caro que hoy tenemos en el bolsillo.

Pero el GPS no se queda atrás. Ahora cualquier teléfono incluye Google Maps y la posibilidad de guiarte paso a paso, pero en 1982 un aparato como el Ti Navistar costaba 119.900 dólares de la época, unos 279.000 actuales, algo más de 250.000€. Bajando mucho más el precio, una grabadora de voz digital de Sony podía costar unos 2.500 dólares -8.600 dólares actuales, unos 7.700€-.

Reproductor de video, música, vídeoconsola…

Pero la lista de aparatos que hoy tenemos en forma de aplicación es mucho más larga, empezando por el reloj digital que nos encontramos cada vez que encendemos la pantalla de bloqueo, que en 1970 nos habría costado el equivalente a 6.900€ actuales y que hoy para muchos ha sustituido al reloj de pulsera.

Una enciclopedia, una biblioteca médica, reproductores de video, cámara de video, cámara fotográfica y un reproductor musical -sin tener en cuenta los discos-, todo esto se hubiera ido bien por encima de los 1.000€ en los 80, en algunos casos llegando o superando los 4.000€. Hoy son aplicaciones que te vienen preinstaladas en cualquier Android o son accesibles mediante el navegador.

Todo eso sin tener en cuenta el terminal en si, que en aquel momento podría considerarse casi un supersuperordenador. Un usuario de Reddit ha comparado las características y precios de computadoras de la época con los smartphones actuales y un teléfono actual podría llegar a valer unos 1.500 millones de dólares.

Esto pone en perspectiva dos cosas, el precio de los smartphones -que siguen siendo caros en muchos casos, pero visto así…- y la enorme evolución te la electrónica de consumo en este tiempo, no sólo por las cosas que son capaces de hacer o en su tamaño -ya casi jamesbondiano- sino también en su precio.

Vía Reddit