En el mundo de la tecnología, cuando compramos un producto demandamos tener la mejor experiencia posible por el precio que estamos pagando por él. Siendo conscientes de ello, los fabricantes suelen poder toda la carne en el asador a la hora de preparar sus dispositivos.
No obstante, en ocasiones nos encontramos con terminales que nos chocan debido a que deciden prescindir de tecnologías que última generación que dábamos por hecho que llegarían. Hoy tenemos en el punto de mira al Xperia Xp y su ausencia de carga rápida.
Móviles con QuickCharge 3.0: Ni Xperia X Performance ni Galaxy S7
Cuando compramos lo último, demandamos tener lo mejor de lo mejor, y parece que no es algo que siempre se cumpla. El protagonista de hoy es el Sony Xperia XP, dispositivo que según parece, no incluirá Quickcharge 3.0, el último sistema de carga rápida de Qualcomm.
Si revisamos este terminal, no deberían existir indicios de que el terminal no fuese a ser incompatible con el nuevo sistema de carga rápida.
Esta información la podemos encontrar en la propia web de Qualcomm, donde vemos que los nuevos Xperia Xp y X integrarán Quickcharge 2.0, y aquí es donde comienzan nuestras dudas.
El Xperia Xp integra un procesador Snapdragon 820, procesador que si miramos detenidamente en su ficha técnica, llegamos a la conclusión de que sí que debería tener soporte para este tipo de sistema de carga, pero que por algún motivo, se conforma con Quickcharge 2.0.
Teniendo en cuenta que para tener carga rápida de última generación hacía falta un procesador compatible y que la entrada de corriente sea compatible, poca excusa tiene Sony para no integrar este sistema de carga.
Los fabricantes no añaden lo último de Qualcomm en carga rápida
Es difícil saber a que se debe este movimiento, y es posible que el apoyo de una tecnología más obsoleta se deba a un interés de la propia compañía en hacer un terminal más económico para obtener mayores beneficios, algo que entenderíamos en un terminal de gama media pero que nos cuesta comprender en un terminal que se supone que es la mayor representación en los smartphones de Sony.
Nos resulta un poco incómodo y extraño que sabiendo que la compañía ya está desarrollando un cargador con soporte para Quickcharge 3.0 y MediaTek PumpExpress+, estos teléfonos no acaben siendo compatibles.
Por su lado, Samsung y el Galaxy S7 incorporan un procesador Exynos que tampoco aprovecha la carga rápida de Qualcomm. Algo que añadido a la falta de USB Tipo C provocan que esta tecnología que parecía que iba a dar un salto en 2016, todavía tenga que esperar en estar ampliamente disponible. Siempre nos quedará el LG G5 o el Xiaomi Mi 5.