Las Historias de WhatsApp o Status ya están activas de manera oculta, pero pronto llegarán a todos los usuarios. Y tendrán un notable éxito.
WhatsApp por aquí, WhatsApp por allá: por más que no queramos mencionarla, la actualidad nos obliga a hablar de la aplicación más popular con independencia de la opinión que tengamos de ella. Abre la comunicación entre móviles con una facilidad pasmosa. Y supone un acierto seguro cuando solo conocemos el número de la persona. Pero ¿vivirá para siempre de los mensajes? Sus planes van mucho más allá.
Facebook clonó las Stories de Instagram y se las llevó a todas sus aplicaciones. En Instagram han tenido un notable éxito, más moderado en la red social Facebook. Pero el boom llegará cuando las Historias o Status estén disponibles para todos en WhatsApp. Y no queda mucho a tenor de los últimos rumores.
¿Qué es WhatsApp Status?
Es el nombre que recibe actualmente la opción en las betas de la app. No se encuentra activa por defecto, pero sí resulta posible desvelar la opción si se es ROOT y se instala una aplicación que libera Status. Podemos usarlo en la actualidad, pero poco sentido tiene si nadie puede acceder a las Historias ni interactuar con ellas.
Las Historias de WhatsApp ya están disponibles, pero es muy complicado desbloquearlas
Podremos subir fotografías y otro contenido además de texto. Dispondremos de una especie de lista o muro a la que dejaremos acceder según nuestras preferencias. E, igual que ocurre en las Historias de Instagram, las actualizaciones podrían se efímeras. Es decir, desaparecerían tras un tiempo para no dejar rastro.
Lo que en un principio quizá no tenga sentido, trazas de Instagram en una aplicación de mensajería como WhatsApp, cambia sus tornas si se piensa que muchos utilizan la aplicación como una especie de diario personal en el que comparten su vida con los más allegados. Y tener una herramienta en la que colgar fotos, vídeo y textos de manera genérica tampoco es mala idea. De hecho, el propio Line mantenía una sección más parecida a una red social que a una aplicación de mensajería.
La inmensa base de usuarios es un aval para el éxito de las Historias de WhatsApp
A Facebook se le ha metido en la mollera que debe llevar las Stories de Snapchat a todas sus aplicaciones. En Instagram lo ha conseguido con éxito: las reproducciones de contenido efímero van en alza, 150 millones de usuarios cada día la utilizan. Y en una aplicación de mensajería tienen mucho más sentido.
WhatsApp es un entorno privado en el que no queremos publicitarnos más allá de nuestros allegados. El carrete que se reserva la aplicación en el almacenamiento del móvil es inmenso: compartir fotos, vídeos y audios está a la orden del día. De hecho, el formato multimedia es el que más crece. Y una garantía extra de que el contenido más sensible no se propaga más allá de los círculos internos es aplicarle una caducidad, algo que podría tener Status.
Es el éxito de Snapchat: una aplicación privada que ha hecho del contacto multimedia entre personas su razón de ser. Y también es la evolución lógica de WhatsApp: dar herramientas de comunicación a sus usuarios para que puedan expandir su manera de expresarse. Con un añadido: disponer de muros sociales allanaría el terreno a las marcas, muy interesadas en el pastel de usuarios que es WhatsApp.
La evolución del «Estado de WhatsApp» está en fase de pruebas, pero ya lleva así más de dos meses activo. El formato ha madurado y casi está a punto para ofrecerse de manera abierta a quienes usamos la aplicación estrella de mensajería. Y no habrá marcha atrás: cuando las Historias de WhatsApp estén disponibles para todos su éxito será arrollador.