Quizá Android 8 Oreo no suponga un asalto excesivo con respecto a Android 7 Nougat, al menos de cara al usuario, pero la actualización sí lleva implícito el esfuerzo de Google por curar la principal afectación de nuestro sistema: las actualizaciones. Treble se implementa en Android 8 para que los fabricantes no tengan problemas a la hora de actualizar y puedan mejorar la experiencia de sus clientes. Pero no ha habido manera: la tasa de móviles que dispone de oreo es ridícula.
Google ha tardado en ofrecer los datos actualizados de su informa Android mensual. De hecho, en marzo no tuvimos acceso a él, por lo que los últimos datos eran de febrero. Con la actualización del informe se constata el fracaso de Android 8 Oreo: ni el 5 % de los móviles lo tiene instalado. Una realidad flagrante si tenemos en cuenta que esta versión de sistema tiene ya casi 8 meses.
No hay manera: el problema de las actualizaciones no tiene solución
Google se puso muy dura con Android 8 Oreo ya que impuso una obligación importante para todos aquellos que sacaran un móvil con esta versión de sistema: debía tener habilitado Treble, el sistema de actualizaciones que permite renovar el sistema con independencia de la capa del fabricante. ¿Cuál fue el resultado? Los fabricantes siguieron sacando sus móviles con Android 7 Nougat, incluso en pleno 2018. Está claro que hay marcas que no están por la labor de solucionar el problema.
Entrando de lleno en el informe Android de abril, vemos claramente la dejadez que estábamos relatando: solo un 4,6 % de los dispositivos actuales posee Android 8 Oreo; con una cantidad casi testimonial de aquellos actualizados a la última versión estable, 8.1. Eso sí, esta tasa de aceptación es ligeramente superior a la que tuvo Android 7 Nougat el año pasado.
Android 7 Nougat es la versión que triunfa entre los cientos de millones de dispositivos que utilizan diariamente el sistema. La usan el 30,8 %, una diferencia mínima con respecto a los datos de febrero, que era del 28,5 %. Android 6 Marshmallow retrocede ligeramente y ahora se encuentra en el 26 % (tenía el 28,1 % en febrero). Y el tercer peso pesado de abril es Android 6 Lollipop, que se resiste a desaparecer: las dos versiones de sistema se quedan con el 22,9 % del pastel (en febrero se llevaban el 24,6 %).
Los datos de instalaciones apenas se han movido en dos meses de diferencia
Este título es el segundo resumen que haríamos del último informe Android: a pesar de que casi han pasado dos meses desde los datos anteriores, las cifras de instalaciones no variaron en exceso. Esto es llamativo precisamente porque Android 8, con la enorme cantidad de lanzamientos a la que hemos asistido en 2018, sigue sin crecer.
La realidad es la de siempre: Oreo no crecerá en número de instalaciones hasta que Android P ya lleve unos meses en el mercado. Poco importa que Google se esfuerce, hay una enorme cantidad de fabricantes que sigue sin actualizar sus móviles; por más que las grandes marcas sí estén impulsando una notable mejora en su política de actualizaciones.