Ayer fue un día movido para Android y también para Samsung ya que tuvo lugar la conferencia de desarrolladores de ambos. Android se adapta a las pantallas flexibles con una nueva interfaz y Samsung presentó el relevo de Samsung Experience hacia One UI, una capa más natural y apta para las pantallas grandes, también para las flexibles. Pero ¿cómo son realmente esas pantallas?
No supimos detalles concretos del móvil flexible de Samsung ya que la empresa aún se reserva la presentación para un evento propio, pero sí conocimos la evolución del componente clave en ese dispositivo, su pantalla. Infinity Flex Display, así se llama el nuevo panel desarrollado por Samsung. Está llamado a ser la próxima revolución en móviles pese a que aún no sepamos si los teléfonos flexibles son realmente prácticos. Llamativos sí lo son, eso sin duda.
Infinity Flex Display, pantallas para los smartphones que cambian de tamaño
La idea de la que partió Samsung fue clara: ¿y si la pantalla de un móvil pudiese cambiar de tamaño? Usar el teléfono como tal, desplegarlo para que sea una tablet, crear distintas tareas para distribuirlas a lo largo de todo el panel… Y garantizar en todo momento los mecanismos de desplegado y que las pantallas continúan protegidas contra las roturas y arañazos.
Infinity Flex Display viene a solucionar todos los inconvenientes planteados con un panel orgánico flexible que posee las siguientes características:
- Tamaño desplegado de 7,3 pulgadas.
- Relación de aspecto: 4,2:3.
- Resolución: 1536 x 2152 píxeles.
- Densidad de pantalla: 420 dpi.
- Material de recubrimiento flexible, sin cristal.
Samsung no ha detallado la tecnología del panel, pero queda claro que es Super AMOLED a tenor de la infografía que ha revelado explicando la evolución de la pantalla de sus teléfonos. Además, sabemos que el móvil flexible presentado vendrá acompañado de una segunda pantalla, anclada al frontal, que ofrecerá un tamaño de 4,58 pulgadas con resolución de 840 x 1960 píxeles y densidad de pantalla de 420 dpi. El panel queda descentrado en el frontal ya que se desplaza hacia la parte superior dejando abajo un marco que, presumiblemente, no tendrá uso. Habrá que ver si Samsung coloca en esa sección botones táctiles u otro elemento.
La clave de la pantalla flexible es la nueva interfaz, One UI
Primero fue TouchWiz, la casi odiada por todos interfaz primeriza de Samsung. Después vino Samsung Experience, una vuelta de tuerca personalizada que trajo consigo un diseño renovado. Y ahora llega One UI, una capa algo más limpia y minimalista que busca sacar provecho de las pantallas grandes y, por ende, del Infinity Flex Display.
Zonas de interacción dentro de la pantalla con superficies de lectura, opción de utilizar hasta tres aplicaciones a la vez, mejor uso con una mano, mayor claridad en dicho uso, estilo Android 9 Pie para tarjetas y menús… Y con un Android completamente adaptado a pantallas plegables: está claro que veremos la Infinity Flex Display en multitud de dispositivos, y quizá no solo en Samsung. ¿Será realmente útil?