La tasa de absorción específica o SAR sirve para medir la radiación que desprenden nuestros dispositivos móviles. Aunque no existe un consenso sobre los efectos nocivos en la salud humana, tendemos a favorecer aquellos smartphones con el menor SAR.
Hoy te contamos qué es exactamente el SAR y por qué es importante saber qué radiación emite un móvil antes de comprarlo. Como siempre es mejor prevenir que curar, es preferible no decantarnos por aquellos equipos que estén por debajo del límite. Más aún cuando las autoridades francesas han detectado 8 terminales que podíamos comprar y estaban superando los umbrales de radiación permitidos.
¿Qué es el SAR?
El SAR (Specific Absorption Rate) mide la velocidad con la que el cuerpo humano y sus tejidos absorben la energía de la radiación electromagnética de cierto equipo. Su medida es el Watt por kilogramo, y en cuanto a comunicación móvil, la energía de los campos electromagnéticos es absorbida por la parte del cuerpo más próxima al teléfono.
La cantidad de radiación que nuestro organismo absorbe varía porque la tasa que emite un dispositivo también lo hace. Esto se traduce en que, cuando escuchamos que un terminal tiene un SAR de 1.18 W/kg, no quiere decir que ese valor se mantenga constante. La distancia a la que sostenemos un terminal o el uso que le demos (hacer una llamada, por ejemplo), variará la cifra del SAR y su absorción.
¿Cómo se mide el SAR?
Los niveles de SAR de nuestros móviles son un número fijo que se consigue tras estudiar la radiación en un laboratorio y en unas condiciones concretas. En ese laboratorio se realiza un experimento que mide los niveles de radiación y determina sus niveles máximos, tanto de radiación, como de absorción. Ese es el SAR de un dispositivo.
Las radiofrecuencias que emite un dispositivo móvil son mínimas. De no ser así, lo primero que notaríamos es que nuestro organismo eleva su temperatura. De este efecto nos podemos despreocupar porque los campos de radiofrecuencia no son tan grandes como para que padezcamos un cambio térmico.
Las pruebas que miden el SAR son inexactas, por lo que mejor decantarnos por los dipositivos con el menor SAR
Ahora bien, lo que sí debería preocuparnos son las ondas de muy baja frecuencia. Estas son las que generan el debate porque no hay exámenes certeros sobre sus efectos negativos. La exposición a las ondas de la telefonía móvil podrían interferir con algunos de nuestros órganos como el corazón o el cerebro. Unos niveles SAR elevados interferirían con su franja electromagnética, provocando un empeoramiento de nuestro salud. Pero, como decíamos, nada de esto puede afirmarse con rotundidad.
No obstante, no deberíamos tomarnos al pie de la letra la cifra de SAR que nos da a conocer un fabricante. Lo más prudente será asegurarnos de que nuestro terminal no desprende unas cifras elevadas.
La radiación de un terminal aumenta o disminuye a cada segundo
Al comprarnos un smartphone deberíamos conocer cuál es su radiación SAR. Es una característica más, tan importante o más que otras que sí consultamos con asiduidad. ¡Ojo! El valor SAR de ese teléfono nos indicará el nivel máximo de absorción de radiación en unas circunstancias muy concretas medidas en un laboratorio. En otras palabras, es un valor de referencia.
La precisión exacta no existe cuando hablamos de este concepto. Lo que sí sabemos es que el usuario de un terminal no lo usará en las mismas condiciones del laboratorio que ajusta la cifra para el fabricante. Vivimos rodeados de otras tecnologías. Un móvil nos acompaña en trenes, en coches, busca continuamente las antenas de telefonía más cercanas para ofrecer la mejor cobertura y vive rodeado de redes Wifi. Todo ello interfiere en los niveles de radiación.
Niveles óptimos para nuestra salud
La legislación vigente marca cifras muy concretas en cuanto al SAR. Es algo que llama la atención puesto que hay disparidad de opiniones sobre la peligrosidad de las radiaciones. La diversidad es tal, que llegar a un consenso parece imposible, y lo único que podemos hacer es curarnos en salud. Tampoco sabemos si sus riesgos son mayores de lo que parece. Lo que sí intuimos es que, si los efectos negativos fueran claros, darlos a conocer chocaría de pleno contra los intereses de las compañías móviles.
Por el momento deberemos ceñirnos a la legislación vigente y a los límites de SAR propuestos por los organismos internacionales.
Niveles máximos de SAR
Por ahora las leyes establecen que el SAR máximo no debería exceder los 2 W/kg. Y de nuevo, nos encontramos con el problema de que, pese a que los terminales no suelen exceder los 1,16 W/kg, las pruebas de laboratorio no son precisas. No es lo mismo realizar el experimento situando un terminal a la altura de la cadera, que literalmente pegado a nuestra cabeza cuando hacemos una llamada o escuchamos un audio de WhatsApp.
Los fabricantes de telefonía se ajustan a esos límites y se acogen a que las evidencias respecto a la nocividad son poco claras. Por lo tanto, la tasa de absorción específica siempre se sitúa por debajo de los niveles marcados por la ley.
El eterno debate
Los valores de la tasa del SAR son simplemente eso, una cifra. El debate está en que la radiación que emite un terminal podría aumentar el riesgo de padecer cáncer o incluso producirnos alteraciones genéticas. No hay conclusiones claras porque cuando se calcula el SAR se hace con modelos artificiales que simulan el cuerpo humano.
Estamos algo indefensos ante las radiaciones externas. La mejor manera de protegernos es estando informados, de manera que podamos tomar una decisión concienciada cuando compremos un producto.
Los móviles que emiten menos radiación
Desde El Español se publicó cuáles eran las compañías con los terminales con mayor y menor ratio de SAR. En la lista destacan sin duda el Galaxy Note 8 con una tasa del 0,17 o el Xperia M5 con una radiación de 0,14.
El Xiaomi Mi A1 logra coronarse como el que más SAR emite, seguido del OnePlus 5T y el Huawei Mate 9.
Cómo consultar el valor SAR de mi teléfono móvil
La Oficina Federal de Protección contra la Radiación, o BFS, pone a disposición de los usuarios una herramienta para conocer cómodamente al cifra SAR del dispositivo que hayamos adquirido.
Puedes encontrar aquí esta herramienta; en la que simplemente debes introducir el nombre de tu terminal en el buscador. La BFS expone los valores de SAR según dos usos: cuando el terminal está justo en el oído porque se está produciendo una llamada o en una parte del cuerpo alejada de la cabeza.