Los pagos móviles cada vez están mejor implantados, y las grandes empresas tecnológicas no quieren perderse ese auge. En Google quieren crear su propio banco online, y ya tienen permisos para conseguirlos.
Google ya puede ser un banco
Las compañías tecnológicas han aprovechado para irrumpir en casi cualquier ámbito de nuestra vida. Cómo nos comunicamos, compartimos, vivimos, y cómo pagamos.
Tal y como leemos en El Economista, el banco central irlandés ha autorizado a Google poder operar como entidad de pago propia. A día de hoy, Google podía actuar como intermediario para otros bancos, pero con este movimiento van un paso más allá.
Como entidad bancaria, Google podrá emitir y gestionar tarjetas, realizar transferencias bancarias y realizar cambio de divisas. Como principal diferencia a las entidades bancarias tradicionales, no podrá recibir depósitos.
Qué implicaciones puede tener este movimiento
En estos momentos, Google ya tiene aprobación para operar como un banco en Irlanda y Lituania, por lo que aún le queda un largo camino. La cuestión es ¿qué interés puede tener Google en convertirse en un banco?
Tener el control sobre el dinero es mucho poder para cualquier empresa, razón por la cual las grandes tecnológicas inciden tanto en los pagos a través del móvil. Apple, Samsung y Google están invirtiendo mucho en sus plataformas de pago, y convertirse en su propio proveedor de servicios es un paso más al frente.
Al convertirse en un banco propio, cualquiera puede acceder a Google Pay en su móvil o reloj inteligente
El reto de Google para implantar su propio servicio está en la dificultad para tratar con cada uno de los bancos que operan en cada país. Basta con dirigirnos a la página de ayuda de Google Pay para descubrir la cantidad de bancos que se encuentran accesibles en la plataforma. No es que sea un gran problema para Android, ya que casi todos los bancos en España tienen su propio sistema de pagos, razón por la que prefieren no utilizar a Google como intermediario.