A lo largo de la última década hemos visto cómo el smartphone se ha convertido en una suerte de navaja suiza digital que ha ido sustituyendo a múltiples aparatos y elementos de nuestro día a día. Empezó con la linterna, la radio, el despertador o el GPS. Luego pasó lo mismo con las llaves de casa, la cartera y parece que no se va a quedar ahí.
Google ha empezado a trabajar en una API que permitirá a los estados implementar el carne de conducir dentro de los smartphones con Android, aunque no es algo que vayamos a ver en breve.
Esto es especialmente importante en países como los Estados Unidos, donde el carné hace las funciones de documento de identidad ya que no hay un DNI (el Documento Nacional de Indentidad español) propio.
Más conveniente que llevar el carné
Google sabe que cada vez es más difícil que salgamos de casa sin nuestro teléfono pero además de él hemos de coger otras cosas. Una de ellas es el carné de conducir, obligatorio de portar encima si vamos a coger un coche en muchos lugares.
Así pues, han empezado a trabajar en una API que permitiría integrar de forma segura los datos de nuestra licencia de conducción, de manera que podamos mostrarla cuando se nos pida simplemente enseñando nuestro móvil.
La forma de funcionamiento sería por NFC y se enviaría por Bluetooth o Wifi al dispositivo destino, por ejemplo en una comisaría o en un control policial.
¿Y si no tenemos batería?
Uno de los problemas potenciales de este sistema se daría cuando nos quedáramos sin batería y es que en ese caso no podríamos hacer nada con el móvil. En teoría.
Google está trabajando en una nueva sección en un hardware que permitiría el uso de esta función incluso si el móvil no tiene energía suficiente para encenderse. Aún no han especificado cómo funcionaría en detalle pero desde luego es algo que debería venir de serie en los nuevos smartphones.
No obstante no es algo que no hayamos visto ya en Google. El chip Visual Core de los Pixel tiene el mismo enfoque, un procesador complementario para ciertas actividades.
Un aumento de comodidad
El llevar este tipo de documentación sería más seguro (por ejemplo lo adolescentes no podrían tapar cierta información del mismo a mostrarlo) y más fácil de usar, al ser posible la actualización o modificación del mismo de manera no presencial, si el sistema así se implementa.
Pero como hemos dicho este es un proyecto que acaba de arrancar y al que aún le queda mucho por delante. Veremos si dentro de diez años miramos nuestras carteras y recordamos con extrañeza ese momento en el que aunque habíamos quitado las tarjetas de fidelización y de crédito aún debíamos llevar el carne de conducir.