Salir a la calle solo con el teléfono no solo podría ser fruto de un despiste, también es el presente para muchos de los que utilizan los pagos móviles. Dado que con el smartphone tenemos las tarjetas del banco, e incluso las de fidelización, basta con acercarlo al datáfono para adquirir casi cualquier producto. Ahora bien: ¿por qué no utilizar el smartphone para lo contrario, para recibir los pagos?
Actualmente, la solución habitual para cualquier comercio que desea acceder a los pagos electrónicos es contratar un datáfono con su entidad bancaria. Este tipo de aparatos, que ofrece acceso a los pagos introduciendo la tarjeta y también a los abonos «contactless», es un dispositivo algo torpe que también posee un coste de uso. Así que, dado que todo comerciante tiene un smartphone, este podría incluir transacciones electrónicas en su tienda con solo utilizar su móvil Samsung.
Cualquier tienda podrá recibir pagos electrónicos sin necesidad de un datáfono, solo con un Samsung Galaxy
Los pagos móviles entre particulares no son nada extraño ya que los hacemos a diario. Basta con abrir la aplicación de pagos, o establecerla como predeterminada y desbloquear el teléfono, para que adquiramos un café, un libro o hasta un coche con solo acercar el teléfono al datáfono. Eliminando al segundo dispositivo de la ecuación no solo se facilitan los requerimientos para el comerciante, también le resulta más económico. Y sin que se pierda la seguridad de las transacciones en el camino.
Utilizar un teléfono móvil como centro de pagos comercial es algo más que habitual en países como China (basta un QR), pero no ha terminado de exportarse al resto de territorios. Samsung quiere conseguirlo apoyándose en Mobeewave, una plataforma de pagos sin contacto que acepta transacciones de VISA, Mastercard y otros proveedores de pagos. Gracias a este acuerdo, Samsung espera crear un punto de venta móvil accesible en todo el mundo para 2020.
Para acceder a este punto de ventas solo hará falta un Samsung Galaxy que posea NFC y Samsung Pay. El sistema no necesita ningún tipo de cable o adaptador: el smartphone ya cuenta de serie con toda la tecnología. Y acepta tarjetas de crédito, de débito, se puede pagar con Samsung Pay, Google Pay, Apple Pay… La única limitación es la banda magnética: quienes no tengan tarjeta para pagar sin contacto no podrían acceder a la solución de Samsung. Cada vez son menos, pero no hay duda de que es un inconveniente.
Samsung y Mobeewave andan probando este punto de ventas en Canadá. A partir de aquí, ambas empresa desplegarán su plataforma en todo el mundo comenzando en 2020.