El Google Pixel 4 es uno de los móviles más importantes del año y uno de los grandes referentes en fotografía del año, pero es un móvil que en otros aspectos no está dando los resultados que esperaban. Una de las últimas decisiones de Google muestra, una vez más, que el software de los Pixel 4 no esta del todo preparado para una versión final.
Motion Sense no tiene API para desarrolladores: qué significa eso
Son varias las razones para querer elegir un Google Pixel por encima de otros móviles. Más allá de lo que digan los test de fotografía, un año más vuelve a parecernos la mejor cámara Android en términos de calidad.
El móvil tiene dos importantes exclusividades: la primera es un procesador neuronal específico para la nueva generación de Google Assistant (capaz de transcribir en tiempo real) y la otra es una tecnología que consideramos que será clave en el futuro post-smartphone.
El radar Soli llega por primera vez a los móviles para hacer funcionar una característica llamada Motion Sense. Motion Sense es capaz de detectar por ondas de radar gestos que hagamos con nuestras manos para parar una alarma, responder una llamada o pasar a la siguiente pista de música.
Esta interacción no es magia, sino software, y requiere un trabajo de adaptación en la experiencia de usuario por parte del desarrollador de cada aplicación que sea compatible.
Sin una API, crear una aplicación que use Motion Sense es misión imposible.
Para poder realizar dichas adaptaciones es muy importante que exista una API, una Interfaz de Programación de Aplicaciones, herramienta que provee a los desarrolladores de todos los recursos para aprovechar las capacidades de cualquier tecnología de una forma más estandarizada. Las APIs existen para prácticamente cualquier recurso que un desarrollador pueda utilizar, y Motion Sense no es excepción.
Pero Google ha dicho con Motion Sense, nanay. O al menos eso ha confirmado Google a Android Police. «De momento no, pero os informaremos si hay cambio de planes»
Una ausencia que da más peso a nuestras sospechas
Ante todo, los Google Pixel son móviles que aspiran a ser la competencia directa Android del iPhone, un móvil que suele ser muy criticado por avanzar e innovar a menor velocidad que sus rivales. Pero aquí, el equipo que desarrolla los Google Pixel tiene algo que aprender, y es que es más importante implementar una característica tarde y bien que añadir varias novedades y que ninguna de ellas esté realmente preparada.
Google ha sido muy ambiciosa y ha dejado el software de todas las novedades a medio hacer.
Las últimas noticias nos hacen creer que la planificación de software del Pixel 4 ha sido desastrosa. Recapitulemos:
- Deja de lado el lector de huellas por un reconocimiento facial, pero este se puede desbloquear con los ojos cerrados.
- Tiene una pantalla de 90 Hz con una fluidez excepcional, pero por limitaciones técnicas en la falta de refresco adaptativa funciona en muy reducidas situaciones.
- Esta admisión nos recuerda por qué Samsung está vendiendo esta tecnología a otros fabricantes pero aún no se atrevieron a implementarla en sus mejores Galaxy.
- La nueva generación de Google Assistant es impresionante, pero solo funciona en inglés.
- Algunos Pixel tienen problemas de ralentizaciones.
- La grabación de vídeo 4K a 60 imágenes por segundo ni siquiera ha sido contemplada.
Y por último, un Motion Sense que aún no está preparado para los desarrolladores. Afortunadamente son características que pueden corregirse a través de actualizaciones de software. Y en este sentido, confiamos en que Google si dará la talla.