Durante muchos años Xiaomi se ha visto como un fabricante de móviles con un gran foco en la relación calidad precio de sus móviles. Había terminales de gama media, de gama baja y de gama alta, pero prácticamente la totalidad de ellos ofrecía más que sus rivales directos en igualdad de precios.
Esto sabíamos que tenía que acabar tarde o temprano porque la competencia empezaba a amenazar a Xiaomi en ese ámbito, y la marca se quiso mover a franjas de precio mayores, no para ganar más dinero, sino para ofrecer mejores productos.
El Xiaomi Mi 9 fue el último de su especie, un terminal de gama alta de Xiaomi con un precio excepcionalmente bajo. El siguiente flagship de la empresa, el Xiaomi Mi Note 10, ya anunciaba una subida en el precio de los modelos de esta categoría, y el precio del Xiaomi Mi 10 será el siguiente.
Los rumores apuntan a un Xiaomi de 1000 euros
Hace unas semanas se empezaron a filtrar los primeros precios de los Xiaomi Mi 10. En concreto eran los costes de los modelos en Italia, un país que tiene unos precios ligeramente más altos que España, pero que está en el mismo segmento del mercado.
Estos primeros rumores hablaban de un Xiaomi Mi 10 que llegaría a costar 899 euros, y de un Xiaomi Mi 10 Pro 5G de 1099 euros. Tenemos que coger con cuidado esos datos, pero de confirmarse, estaríamos ante los terminales más caros de Xiaomi, por mucho, al menos si exceptuamos los MIX.
Incluso los modelos en China tendrán un precio sustancialmente superior al de otros años, como se ha visto en otras filtraciones.
Los ejecutivos de Xiaomi confirman la subida de precios
Este movimiento seguramente no sea muy bien visto por muchos de los fans de la empresa, y los directivos más importantes de la compañía, como Lei Jun, su CEO, o Lu Weibing, el responsable de Redmi, ya han empezado a avisar en sus perfiles de Weibo de que este móvil será el principio de una nueva etapa para Xiaomi.
Cuando se anunció que Redmi se iba a conformar como una empresa independiente de Xiaomi muchos se preguntaron el motivo, si al final se vendían en las mismas tiendas, usaban los mismos componentes, etc.
El poder cambiar la imagen de marca de los móviles Mi, no de los Redmi, es un buen motivo. De esta manera la compañía podía seguir manteniendo a los usuarios que querían móviles más baratos ofreciéndoles opciones dentro de la familia Redmi a la vez que mejoraba la imagen de Xiaomi hasta equipararla a la de Apple o Huawei.
De hecho, esta última ha ejecutado un movimiento similar en los últimos años. No hace demasiado la empresa era un fabricante de móviles de marca blanca para operadoras y ahora se enfrenta abiertamente a Samsung o a Apple. Seguro que Xiaomi quiere lo mismo, y para eso necesita mejores móviles. Obviamente, serán más caros.