España es uno de los mercados internacionales con más competencia. A la presencia de marcas clásicas como Sony, LG, Samsung, Apple o Motorola en los últimos años hemos visto la llegada de nuevos actores como OPPO, Xiaomi y más recientemente Vivo.
Estas marcas chinas siempre han tenido una buena acogida en nuestro país, incluso cuando había que usar webs de importación para conseguir sus móviles.
La consultora Canalys ha confirmado el buen ritmo de las firmas en nuestro mercado, sobre todo en el caso de Xiaomi y OPPO, que crecen de manera increíble.
Xiaomi se mantiene en el número 1
La empresa capitaneada por Lei Jun se mantiene como la primera en ventas en España, tras haber superado hace unos trimestres a la mismísima Samsung, que se mostraba intratable. El crecimiento de año a año es del 93%, lo que implica que casi han doblado el número de envíos de móviles a sus distribuidores.
Gran parte de este crecimiento es a costa de Huawei, que ha caído un 14% anual, debido al veto de los Estados Unidos. Será interesante ver si en un futuro esto cambia.
OPPO crece a un ritmo de cuatro dígitos
También hay que resaltar el comportamiento de OPPO en España, con una propuesta más convencional que Xiaomi, apostando por ejemplo por asociarse con operadoras.
Y parece que la estrategia funciona ya que su subida interanual es de cuatro cifras, en concreto de un 1456%. Al tener una penetración tan baja en 2019 es posible lograr estas subidas.
Pero lo importante es que su cuota de mercado es del 8%, una cifra que la coloca por encima de Apple y con posibilidades de superar a Huawei en poco tiempo si la situación no cambia.
Samsung ha sabido mantener un crecimiento menor pero aún así muy considerable y vemos cómo el resto de marcas, más allá de estas cinco, se quedan con un escaso 10% del mercado.