Si nuestros dispositivos móviles han evolucionado exponencialmente en años, la tecnología de la batería ion-litio sigue estancada, pero todo podría cambiar con el sorprendente descubrimiento de un equipo de la Universidad de Cambridge.
Con este avance se podría cargar un smartphone en simplemente 5 minutos. Si últimamente estamos ante un gran avance en la tecnología de carga rápida, como la de Xiaomi de 200W, lo que tenemos entre manos podría ser toda una revolución.
Cargas completas de 5 minutos para tu móvil
Desde The Independent llega la información sobre un equipo de la Universidad de Cambridge ha desarrollado una técnica de bajo coste que consigue ver qué pasa dentro de la batería de ion-litio de una forma que no se había hecho posible hasta ahora.
El método ha sido publicado en la prestigiosa publicación Nature este mismo miércoles pasado y permite a los investigadores identificar los 'límites de velocidad' para los ciclos de carga en las baterías para así averiguar formas de maximizar su potencial.
Ashkay Rao, investigador del Laboratorio Canvedish de Cambridge, mencionó: "hemos descubierto que hay diferentes límites de velocidad para las baterías de ion-litio dependiendo si está en proceso de descarga o de carga."
Mantiene, que cuando se carga, la velocidad depende en cómo de rápidos los iones de litio pueden pasar a través de las partículas del material activo. Cuando se descarga, la velocidad se basa en cómo los iones son insertados en los bordes.
Si podemos controlar ambos mecanismos, se permitiría que las baterías de ion-litio cargasen mucho más rápido.
Cómo lo han conseguido
Las baterías de ion-litio son una tecnología que está permitiendo esta revolución actual de los dispositivos móviles, pero cuenta con algunos límites como son su baja densidad de energía comparada a la del petróleo, o como si se incrementa la transferencia de energía puede causar sobrecalentamiento o que simplemente explote.
Para poder pasar por encima de esos límites y así maximizar su uso, el equipo de la Universidad de Cambridge desarrolló una técnica de microscopía óptica llamada dispersión interferométrica que les ha permitido observar las transiciones en los ciclos de carga y descarga.
Lo mejor de todo es que esta técnica no supone un alto consumo de recursos a diferencia de otras formas anteriores para observar los procesos internos de la batería ion-litio.
Christoph Schnedermann, coautor de la investigación, mantiene que esta técnica de laboratorio es un enorme cambio en la tecnología de la velocidad de carga y puede ser una pieza importante del puzle en el desarrollo de la próxima generación de baterías.
Como últimamente está sucediendo con la tecnología de carga rápida de los móviles que nos permiten cargas muy rápidas, ésta podría suponer un salto cualitativo para no tener que esperando a las baterías de grafeno, y que lo importante sea la carga rápida.