Hoy es día 1 de abril, el día de los inocentes en el mundo anglosajón, perfecto para hacer bromas. Las empresas llevan sumándose a esto mucho tiempo, incluso anunciando productos locos sólo para ganar algo de visibilidad. Algo así ha hecho Nothing, la empresa capitaneada por Carl Pei, que se espera anuncie en pocos meses el Nothing phone (1).

Ha anunciado un nuevo móvil que no van a vender, el Another (1), cambiando incluso el nombre de su compañía en el perfil de Twitter.

Nothing está subiendo mucho las expectativas

La empresa realizó hace unos días una suerte de mini rueda de prensa en la que avanzó cómo sería Nothing OS, su sistema operativo basado en Android, además de dar las primeras pinceladas de su nuevo móvil.

Hoy lo que ha hecho la compañía ha sido publicar una imagen del que no será su próximo terminal, un móvil genérico con nombre inventado pero que bebe de los diseños de los terminales actuales.

La empresa se ríe así de que las compañías ya no innovan y que, desde que Apple lanzó el iPhone, todos los diseños se han ido acercando a la misma idea (quizás con la salvedad de los móviles plegables).

Si el Nothing (1) fracasa podría ser el final de la empresa

Que las empresas pequeñas usen la viralidad y las redes sociales para intentar ganar visibilidad y controlar el gasto en marketing no es nada nuevo. La propia Apple lo hacía cuando no era el gigante que es hoy en día y tenía que enfrentarse a firmas como IBM, Xerox o Microsoft.

El problema es que cada vez que vemos un gesto por parte de Nothing, una declaración por parte de sus responsables o una filtración, las expectativas, el hype, suben. Incluso han cambiado la portada de su web.

Eso es bueno porque genera interés en la marca, pero también hace que sea cada vez más difícil que nos sorprendamos y nos contentemos cuando el Nothing phone (1) sea oficial.

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