Pese a decisiones polémicas como la prohibición de compartir cuenta en Netflix, si sigues pagando por el servicio es probablemente por todo el contenido que puedes ver. Y es verdad que la clave para que se haya hablado tanto de Netflix en los últimos años está en la gran cantidad de producciones propias, tanto series como películas.

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De hecho, Netflix es una de las productoras más prolíficas, y se puso como objetivo lanzar una película nueva a la semana; sin embargo, algunos expertos tenían dudas de que pudiese sostener ese ritmo durante mucho tiempo, y los últimos cambios internos de la compañía les han dado la razón.

Menos películas en Netflix

Según ha revelado Bloomberg, Netflix ha iniciado una “reestructuración” de su división dedicada a la producción de películas, un eufemismo para los despidos que últimamente estamos escuchando mucho en el sector tecnológico. En otras palabras, Netflix no puede mantener semejante cantidad de proyectos (y empleados), y va a reducir la cantidad de empleados dedicados a su producción.

A efectos prácticos, las unidades dedicadas a los proyectos de medio y bajo presupuesto se fusionarán en una sola; se espera que eso repercuta directamente en la cantidad de películas producidas al año, aunque aún no se conoce el impacto real.

En cambio, la unidad dedicada a las megaproducciones se ha mantenido intacta, por lo que se espera que Netflix siga produciendo películas de alto presupuesto, con actores famosos, actores reconocidos y efectos especiales de calidad. En ese sentido, si sólo te interesan las películas más populares de Netflix, realmente no deberías notar cambios.

Netflix no dejará de producir películas, pero serán blockbusters como "Frankenstein" de Guillermo del Toro

En Netflix plantean esto como un cambio de filosofía, ya que ahora se centrarán más en la calidad que en la cantidad. Sin embargo, hay muchas películas de bajo presupuesto que son tal vez más interesantes que los ‘blockbusters’, especialmente si tienes un rato libre y quieres algo diferente. El “fondo de armario” suele ser importante para los servicios de streaming, para los usuarios que más usan el servicio y ya se han visto las películas populares; también es una manera de justificar el elevado coste de la suscripción de Netflix comparada con la competencia.

Lo único que parece claro es que a partir de ahora Netflix va a lanzar menos películas, al menos en comparación con los últimos dos años. Si eso afectará a la calidad general del servicio es algo que está por ver.

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