Hace una semana publicamos un artículo en el que contamos las cosas buenas que tiene Tesla como marca, los motivos por los que comprar un Tesla ahora no era una mala opción. Sin embargo, no todo es positivo, obviamente, y en este artículo hablaremos de la parte contraria, los motivos que aún echan para atrás a mucha gente cuando miran un coche de la empresa dirigida por Elon Musk.
Calidad de acabados
Uno de los memes de Internet relacionado con Tesla es que su calidad de acabados y fabricación es paupérrima. La realidad es que ese meme tiene parte de verdad y parte de exageración.
Tras un mes usando un Model Y tengo que decir que, en el interior no he visto fallos de ningún tipo, los materiales son buenos y la construcción sólida. La insonorización es más que correcta y el coche es cómodo.
En el exterior, no obstante, sí que se aprecian ciertas partes que podrían haberse ensamblado mejor. Me refiero a la colocación de los paneles, el grosor de las juntas...
Es un fallo visual, estético, pero que en ocasiones está presente. No pasa en todos los coches, pero es que teniendo en cuenta lo que cuestan, no debería pasar en ninguno.
Interior minimalista
Me encanta el minimalismo, desde que empecé a estudiar arquitectura. Por eso la línea de diseño interior de estos coches me encanta.
Sin embargo, esto es algo que choca a mucha gente, que quiere un diseño más clásico, botones físicos para realizar acciones, etc.
Lo único que sí que echo algo en falta es poder controlar la climatización sin tocar la pantalla, con botones, aunque al menos puedo hacerlo por voz.
Solo hay una pantalla
Aunque no todos los coches de Tesla tienen solo una pantalla, la realidad es que el 97% de sus ventas sí que carecen de una segunda pantalla.
Los Model y Model 3 disponen de una enorme pantalla central donde ver toda la información del coche, tanto de conducción como de entretenimiento.
Hay gente que prefiere tener los datos tras el volante, o en un Head Up display. A mí me da igual porque el Citroën C4 que tenía también tenía las pantallas centrales, pero es algo que hará descartar a muchos compradores estos coches.
Compra online
La compra de un Tesla siempre es online. Algunos diréis "Pero si hay concesionarios". Sí, pero la gente que trabaja ahí está solo para ayudar y aconsejar, ni te van a hacer descuentos ni vas a firmar nada ahí cuando reserves el coche.
Puedes realizar la reserva desde tu casa o desde el ordenador del concesionario, pero igualmente es algo online.
La mayoría de marcas están estudiando, si no implantando, sistemas de compra online, saltándose los concesionarios, para tener más control del precio final de sus vehículos, pero a día de hoy aún es normal acudir a varios concesionarios a ver quién te da mejor precio.
Sin Android Auto ni Apple CarPlay
Una de las cosas que más me gusta del Dacia Spring es su compatibilidad con Android Auto. Es algo que echo de menos en el Model Y.
Es cierto que la interfaz de Tesla es una de las mejores del sector, si no la mejor, pero al no tener tienda de aplicaciones las funciones están limitadas a lo que quiera Tesla.
Diseño exterior
En el canal de YouTube que abrí hace unas semanas alguno me indicaba que había descartado los Tesla por su estética. Demasiado sencilla y sin cambios.
A mí me parece muy bonita y atemporal, pero es cierto que la marca lleva casi 0 años usando la misma línea de diseño.
El cambio en el Model 3 se acerca, pero aún así no se puede ni comparar con lo que hacen otras marcas, que cambian de lenguaje de diseño cada pocos años.
Bajada de precios muy variable
Comprar un coche a un precio y ver que dos semanas después cuesta menos es algo que no gusta a nadie. Lo digo por experiencia. ¿Es suficiente eso para alejarte de una marca? Para algunos sí.
Siempre es bueno esperar a que haya alguna promoción que permita ahorrar un dinero en el precio, la financiación y demás, pero está claro que comprar un Tesla a un precio no garantiza que no vaya a bajar antes de lo que esperabas.
Sin cámara 360º
Las cámaras de los Tesla son muy buenas, pero tienen algunos fallos. Para empezar, no tenemos cámara de 360 grados. Esa visión aérea es muy útil para aparcar, y Tesla, por algún motivo, no la da. Seguramente sea por no tener cámara en el paragolpes delantero.
Además, la cámara interior no permite su visualización de forma sencilla, aunque nos deja usarla para revisar el coche con el modo centinela o hacer videollamadas.
No tiene radares
Tesla eliminó los radares hace unos meses en sus coches más baratos. Para la conducción autónoma esto es un empeoramiento, y hay coches que cuestan menos de la mitad, como el propio Dacia Spring, que sí lo llevan.
No tiene sensores de aparcamiento
Pero aún es la eliminación de los sensores de aparcamiento, que han sido sustituidos por Tesla Vision, un sistema que usa sólo las cámaras. No es tan bueno ni preciso previso, y los rivales de Tesla tienen aquí una ventaja.
No tiene limitador de velocidad
Tesla tiene una función para limitar la velocidad máxima del coche desde la app. Entonces, ¿por qué digo que no tiene limitador de velocidad?
Porque lo que no tiene este coche es algo como lo que tenía mi Citroën C4, que permitía, mientras ibas conduciendo, establecer la velocidad máxima a la que circulas, y no pasaba aunque aceleraras un poco. De esta forma, es posible no ir más rápido de la cuenta en ciudades, evitando multas.
Vamos, es que hasta el Dacia Spring lo tiene, aunque no disponga de control de crucero.
Techo panorámico
El último motivo para descartar un Tesla, sobre todo en climas cálidos, es que el techo panorámico da calor. Pero eso pasa en todos los coches con este techo. El problema es que no podemos taparlo porque Tesla no tiene un sistema de cortinillas motorizado como sí tienen otras marcas.
Como veis, muchas cosas tienen Tesla aún que mejorar para intentar convencer a parte de la población de comprar sus coches. ¿Me arrepiento yo de haber comprado el Model Y? En absoluto, pero eso no me hace dejar de ver los inconvenientes de los coches de esta marca.
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