Ya hay varias compañías que andan detrás de dispositivos que faciliten la interacción con algunos quehaceres digitales que se llevan su tiempo. Uno de ellos es el creado por Humane AI con ese especial pin y ahora llega otro desde el CES 2024 que se celebra en Las Vegas: Rabbit R1. Un dispositivo bien especial que tiene como objetivo ser un asistente personal con todo el poder de la inteligencia artificial generativa para que el usuario interaccione con su voz y R1 ejecute acciones o simplemente las repita una detrás de otra para manejarse con interfaces.
Y es que cualquier smartphone tiene instaladas unas decenas de apps para todo tipo de objetivos y experiencias. Lo que no quita que llegue a ser un poco complejo manejarse con todas ellas, sobre todo para las personas que no tienen tanto tiempo en su poder o simplemente aquellas más mayores que les cuesta entender ciertos conceptos básicos. Es aquí donde entra en juego este dispositivo diseñado por una nueva startup llamada Rabbit.
El dispositivo Rabbit R1 es realmente un asistente con todo el poder de la IA para que a través de diálogos se puedan gestionar o manejar todas las apps instaladas en un móvil o sea capaz de identificar objetos o personas en el mundo real. Es como si fuera una especie de walkie-talkie con IA. Y es lo suficientemente atractivo en su diseño para atrapar la curiosidad de cualquiera gracias al trabajo de ingeniería llevado a cabo por Teenage Engineering.
El Rabbit R1 se caracteriza por una pantalla táctil de 2,88 pulgadas, una rueda analógica para el scrolling o desplazamiento, dos micrófonos, un altavoz y un 'ojo' con vista de 360 grados', que no deja de ser una cámara que puede ser girada hacia cualquier ángulo.
El botón físico para interactuar
La principal interacción con el R1 es a través del botón con el que se solicita a Rabbit OS que comience a 'escuchar'. Aquí la experiencia es como con cualquier otro asistente, aunque con todo el poder que otorga la IA generativa para que Rabbit R1 sea capaz de entender todo lo que se le solicita, ya sea una receta de cocina, reservar un Uber o simplemente realizar cualquier consulta al buscador de Google.
En el vídeo demostración se puede ver perfectamente como Rabbit R1 responde rápidamente a cualquier tarea gracias al Modelo de Acción Mayor (LAM), que es justamente la mayor innovación de este dispositivo según Jesse Lyu, su CEO. Está diseñado para realizar acciones en las interfaces en vez de usar APIs o apps. Es decir, que puede ser 'entrenado' para realizar cualquier tarea que pueda ser hecha a través de una interfaz de usuario.
Porque al final cualquier interacción que se realiza en cualquier app, ya sea Spotify, YouTube o la misma Twitch, no dejan de ser acciones repetitivas que se realizan una vez detrás de otra. Se pulsa en la app, se toca en el botón que abre las listas de reproducción y luego en la playlist que se quiere escuchar en la misma Spotify. Es aquí donde Rabbit R1 aprende de esas interacciones para que el usuario se olvide de realizarlas y este dispositivo, como si de un asistente personal se tratase, las repita al ordenárselas con la voz.
Lyu muestra cómo funciona Rabbit R1 al 'enseñarle' cómo se genera una imagen con IA usando Midjourney a través de Discord. Una vez que Lyu realiza el proceso, Rabbit OS ha registrado cada una de sus acciones para repetirlas cuando se le solicite.
Identifica objetos o personas
Pero no todo queda en entrenar a Rabbit R1, ya que también permite usar su cámara para que dirigida al interior del frigorífico se le pueda pedir que recomiende una receta con todos los alimentos bajos en calorías que identifique; algo que ya puede hacer también ChatGPT a través de la misma solución de Microsoft con su nueva app en Android.
De hecho, su cámara siempre mira hacia dentro por defecto para respetar en todo momento la privacidad del usuario. Eso sí, cuando se activa su sensor ya gira hacia fuera para que pueda identificar personas o cualquier cosa del mundo real; como el mismo ejemplo del frigorífico.
Rabbit R1 es un dispositivo sorprendente que está disponible para adquirir en España por 184,95 euros (precio neto). Tiene una autonomía para llegar al día completo según mantiene su CEO, pero del que se desconoce si es fácil entrenarlo para manejarse con apps y servicios. Lo que queda bien claro es que 2024 va a ser también un año en el que este tipo de asistentes van a ser una norma para simplificar las interacciones con interfaces; ahora solo falta que los gigantes tecnológicos imiten la experiencia y actualicen sus asistentes Assistant, Alexa y más.