El sistema Piracy Shield anunciado a bombo y platillo por el gobierno italiano el año pasado ya está en marcha, con resultados agridulces. Por una parte, el máximo regulador de telecomunicaciones, AGCOM, presume de haber bloqueado ya algunos de los servicios más usados para ver fútbol pirata; pero por otra, también se habría llevado por delante a servicios completamente legales.
El gobierno italiano sorprendió con la aprobación ‘exprés’ de una nueva ley contra la piratería en apenas tres meses, que incluía el bloqueo rápido de páginas web sin pasar por un juez y las multas de hasta 5.000 euros a los usuarios de servicios pirata. Todo, con la intención de llegar a tiempo para el inicio de la temporada de la liga el pasado mes de septiembre; aunque en la práctica, no fue hasta diciembre que el Piracy Shield se puso en marcha, y no ha sido hasta recientemente que las primeras páginas han sido bloqueadas.
El Piracy Shield es una plataforma diseñada para que los propietarios de los derechos puedan ordenar el bloqueo de páginas web directamente a los operadores de Internet. El proceso no puede durar más de 30 minutos, y hay cuantiosas multas para las compañías que no sean lo suficientemente rápidas. De esta manera, el objetivo era acabar con nuevos servicios que aparecen justo cuando se está emitiendo un partido de fútbol, para que los usuarios piratas no puedan terminar de ver el encuentro.
IPTV bloqueada
Aunque técnicamente Piracy Shield estuvo disponible desde diciembre, hasta la semana pasada realmente no se usó de manera masiva, y sólo algunos dominios fueron bloqueados con la intención de probar el sistema. Eso cambió el pasado sábado, según informa DDAY.it, cuando se enviaron más de 400 solicitudes de repente; la primera prueba de fuego real, que no pudo aprobar. Para empezar, el sistema se cayó y no pudo aceptar todas las peticiones, probablemente porque superaban la capacidad de los servidores instalados.
Tal vez más preocupante es que entre las direcciones IP bloqueadas había direcciones de CDNs (Red de distribución de contenido), en otras palabras, de nubes de servidores. Una CDN es una red de servidores que aloja multitud de servicios repartidos entre diferentes ordenadores; a diferencia del método tradicional de asignar un servidor a una página web, por ejemplo.
Eso supone que bloquear una CDN no sólo deja sin acceso a la página pirata, también a todas las que han contratado el mismo servicio, como páginas personales o de otros negocios. En concreto, diez direcciones IP bloqueadas pertenecen al CDN británico Zenlayer, y usuarios italianos ya han confirmado que no pueden acceder a toda su red de servidores. A eso hay que sumar que AGCOM no está publicando las direcciones IP bloqueadas con Piracy Shield, a diferencia de lo que hacía con las órdenes judiciales tradicionales; esa falta de transparencia está provocando confusión entre los usuarios.
A todo esto hay que sumar que el bloqueo de páginas pirata no es del todo efectivo, y se puede sortear con métodos habituales como las VPN; en respuesta, la AGCOM amenaza con tomar acciones contra estos servicios, lo que ha provocado que al menos uno haya abandonado el país. En definitiva, Piracy Shield no ha tenido el estreno que AGCOM y los propietarios de los derechos hubieran deseado, y aún no se han puesto en marcha otras medidas como las mencionadas multas, que podrían afectar al 25% de la población adulta de Italia.