El debate sobre las IPTV y su legalidad en España continúa. Aunque la cuestión de si los usuarios podrán recibir multas por ver fútbol pirata aún no se ha decidido, es evidente que esta tecnología es el nuevo objetivo de los propietarios de los derechos.
En España apenas es posible ver el fútbol sin tener que pagar; la mayor parte del contenido está tras muros de pago y suscripciones a servicios privados. Las IPTV piratas responden a la demanda ofreciendo el mismo contenido de manera ilegal, pero más barato e incluso gratis; es una situación que no es nueva precisamente, pero que está alcanzando niveles extremos.
Al menos, no es una situación tan mala como la que tienen en Rusia, donde los servicios piratas son tan populares que se han vuelto profesionales, a un nivel que rivaliza con los servicios legales de otros países.
Fútbol pirata como si fuese legal
En Rusia, la Premier League sigue siendo una de las ligas de fútbol más populares; hasta el punto de que la organización obtuvo un suculento acuerdo de 43 millones de libras con Match TV, una cadena de televisión rusa propiedad de Gazprom, que se sumó a otro con la plataforma en línea Okko Sport, para emitir los partidos en Rusia.
Sin embargo, lo que debía ser el inicio de una era dorada del fútbol inglés en Rusia se torció en el mismo instante en el que Vladimir Putin ordenó la invasión de Ucrania; las sanciones y el sentimiento general en Occidente obligaron a la Premier League a condenar la violencia y a ver cómo esos acuerdos millonarios se quedaban en papel mojado.
Dos años después, en Rusia se siguen viendo partidos de la Premier, sólo que no cómo a la organización le gustaría. De manera llamativa, las retransmisiones no sólo se siguen realizando de manera pirata, sino que son producciones propias, incluyendo sus propios comentaristas en ruso.
La responsable de estas emisiones es Sportscasts, un servicio que ya aparece incluso en los medios locales, presentándose como la mejor manera de ver el fútbol y dando entrevistas explicando su éxito y su visión de futuro. Pese a que no lo parezca, Sportscasts es completamente ilegal, emitiendo todo tipo de contenido deportivo sin tener ni una licencia; originalmente empezó en el 2016 emitiendo partidos de la NBA, y se ha expandido a la Formula 1, al tenis y al hockey sobre hielo.
Sportscasts se diferencia de otros servicios de IPTV pirata en el elevado nivel de producción que tiene, y el soporte implícito del gobierno ruso que disfruta. El servicio cuenta con 50 comentaristas profesionales, que traducen el contenido original en inglés y ofrecen información que tal vez la audiencia se perdería. Incluso llegan a crear sus propios gráficos para mostrar los resultados y datos relacionados con el partido, como una emisión legal.
Y lejos de ser un servicio conocido sólo por unos pocos internautas, Sportscasts tiene su propia cuenta oficial en VK Video, la alternativa oficial rusa a YouTube, donde sube los partidos ya emitidos, cada uno recibiendo decenas de miles de visitas.
Curiosamente, una de las pocas competiciones que Sportscasts no emite es LaLiga española; el motivo es que LaLiga decidió no cancelar el acuerdo con Rusia para la emisión de los partidos de manera legal, a diferencia de la Premier League.
El máximo dirigente de Sportscasts, usa este apoyo español para defender su servicio pirata; afirma que, si la Premier volviese a Rusia, su servicio inmediatamente dejaría de ofrecer sus partidos de manera ilegal, aunque eso suponga el "colapso" de su negocio. De esta manera, espera que poco a poco las grandes competiciones mundiales vayan volviendo a Rusia, usando la piratería de manera patriótica.