El Nothing Phone (2a), antes de que fuera lanzado en España hace unos meses, en una publicación en su cuenta X (antes Twitter) apareció uno de los Pokémon para ser asignado al nuevo smartphone. Y es justamente lo que ha ocurrido desde X con un nuevo Pokémon para aprovechar el momento del anuncio de que su CMF Phone 1 ha llegado a vender 100.000 unidades en tan solo 3 horas.
Aquí Nothing está jugando muy bien sus cartas y añadiendo gran valor a cada una de las propuestas como móviles que lanza al mercado español. Los Pokémon son un fenómeno cultural adherido sobre todo a las generaciones nuevas, que le sirve a la compañía para impactar más en un público que busca sensaciones nuevas; justo las que da, no solamente con estos detalles de los Pokémon, sino también con lo modular y opciones magníficas como imprimir en 3D las traseras del CMF Phone 1.
La imagen publicada por Nothing hace un rato desde su cuenta X (antes Twitter) muestra la evolución del anterior Pokémon del Nothing Phone (2a), el Mega Aerodactyl como el Pokémon evolucionado de Aerodactyl. Se podría pensar que sería el siguiente Nothing Phone (3), pero al ser una evolución del Phone (2a), cabría pensar que la compañía liderada por Carl Pei estaría ideando una variante de este móvil.
El Nothing Phone (3) usaría otro Pokémon que no sería la evolución del Aerodactyl, así que un posible sucesor del Nothing Phone (2), lanzado justo hace un año por estas fechas, se ve como algo que de momento habrá que esperar. A no ser, que Carl Pei esté preparando una nueva sorpresa, pero de momento es lo que hay.
Un día importante para la compañía debido a que ha compartido las cifras de ventas del CMF Phone 1: en tres horas fue capaz de llegar a las 100.000 unidades vendidas para superar el récord que ostentaba con el Nothing Phone (2a) que llegó a las mismas, pero en 24 horas.
Un indicador de que cada dispositivo o accesorio que prepara Nothing, aparte de estar muy bien planteado, está rompiendo algunas cadenas que han bloqueado la gama baja en España y otros países para que disfrutase de un render en 3D de la parte trasera para imprimirla con una impresora 3D, añadir accesorios interesantes para flexibilizar la experiencia o ese impacto que produce que por 239 euros se pueda comprar el CMF Phone 1 con todas estas experiencias y unas especificaciones de miedo para el rango de precio en el que se mueve.