La conclusión de los estudios es clara: los conductores están hartos de las pantallas táctiles en los coches, a menos que sean realmente útiles y tengan Android Auto o Apple Carplay; en caso contrario, las consideran una distracción y una molestia. Y, sin embargo, los fabricantes siguen apostando por llenar el interior de sus nuevos coches de más pantallas; pero pronto, puede que tengan que dar marcha atrás.

Uno de los aspectos más polémicos de las pantallas táctiles en los coches está en las distracciones al volante, hasta el punto de que se ha convertido en un problema de seguridad vial; cosas que antes se hacían con tocar un botón ahora necesitan más tiempo y especialmente, apartar la mirada de la carretera.

Por eso, el pasado mes de marzo, el director de desarrollo tecnológico de Euro NCAP dijo basta, y anunció un cambio en las reglas sobre pantallas en los coches; sin embargo, desde entonces este anuncio ha sido malinterpretado en redes sociales, a veces por error y otras veces para llamar la atención. En TikTok, por ejemplo, no es raro encontrarse vídeos que afirman que los fabricantes ahora están obligados a quitar las pantallas táctiles si quieren conseguir las deseadas cinco estrellas Euro NCAP, algo que es completamente falso.

Para empezar, las nuevas reglas no obligan a quitar pantallas, pero sí a poner botones, que no es lo mismo. Los fabricantes podrán seguir llenando el interior de pantallas, siempre y cuando también ofrezcan botones como métodos alternativos.

La medida entra en vigor en el 2026, pero de hecho, la inmensa mayoría de los coches actuales ya cumple estas reglas, así que los fabricantes no tendrían que cambiar nada; el propio directivo de Euro NCAP admitió que se trataba de una medida preventiva, para evitar que los fabricantes quiten todos los botones de sus futuros modelos. También puede afectar a los nuevos coches chinos que usan grandes pantallas táciles.

Prueba Euro NCAP

Los botones obligatorios serán los de funciones absolutamente básicas para la conducción: intermitentes, luces de emergencia, limpiaparabrisas, claxon y funciones de SOS. Todas esas funciones deberán tener un botón o un control físico para ser activadas, aunque también se puedan activar desde una pantalla táctil.

Incluso en el supuesto de que un fabricante quiera quitar todos los botones del interior de su nuevo coche, podría hacerlo sin problemas. Eso es porque Euro NCAP no es una organización gubernamental y no puede obligar a nada; los fabricantes quieren conseguir las cinco estrellas Euro NCAP por motivos de marketing y porque son importantes para los consumidores europeos, no porque sea obligatorio conseguirlas. Es perfectamente posible que alguna marca decida arriesgarse a tener sólo cuatro estrellas quitando todos los botones y pasando el resto de pruebas de seguridad, aunque está por ver si alguna lo hará.

Eso no significa que este anuncio de Euro NCAP no sea importante, porque lo es. Es una decisión que marca el camino de la organización para el futuro, y que abre la puerta a obligaciones más estrictas; por ejemplo, permite que en el futuro se añadan más botones obligatorios para otras funciones. También deja bien claro a los fabricantes que no pueden olvidarse de la seguridad vial en su afán por llamar la atención con sus nuevos diseños de interior.