Si estabas pensando en cambiar de ordenador, probablemente estarás buscando un nuevo procesador que esté mejor preparado para tus necesidades, especialmente si quieres ejecutar juegos. Pero es mejor que leas esto antes de hacer esa inversión, porque puede que no la necesites si ya tenías un procesador de AMD relativamente moderno.

Y es que a partir de hoy, los usuarios de Windows 11 ya pueden instalar una actualización que mejora el rendimiento de los procesadores AMD; y lo mejor de todo, es que no tenemos que pagar un euro para implementar esta mejora.

Una mejora que, irónicamente, llega con polémica. Todo empezó cuando se publicaron las primeras pruebas de la nueva generación de procesadores Ryzen; las expectativas estaban por las nubes, por las promesas de AMD de que los nuevos modelos eran un 16% más rápidos que los de la generación anterior, y que el Ryzen 9950X iba a ser el nuevo procesador más potente del mundo. Unas promesas que se quedaron en agua de borrajas cuando se publicaron las primeras pruebas independientes y se descubrió que la mejora era mínima; en ocasiones, los nuevos procesadores incluso iban peor que los anteriores.

Después de una investigación, AMD descubrió que Windows 11 tenía la culpa; concretamente, el gestor de hilos y la predicción de ramas, que anticipa las tareas que vienen a continuación para enviarlas a cada núcleo del procesador de manera óptima. En otras palabras, Windows 11 no estaba aprovechando los núcleos de los procesadores AMD como sí aprovechaba los de Intel, por ejemplo.

Inicialmente, la solución a este problema iba a ser implementada en la próxima gran actualización de Windows 11, la 24H2; pero afortunadamente, se ha tomado la decisión de adelantar el lanzamiento de este parche y lanzarlo directamente a todos los usuarios de la última versión de Windows 11, la 23H2.

Las pruebas con el nuevo parche no mienten: la mejora de rendimiento es espectacular. Con un sistema actualizado, Hardware Unboxed ha comprobado mejoras de hasta el 35% en algunos juegos, y eso supone que los nuevos procesadores no sólo cumplen las promesas de AMD, en algunos casos incluso las superan.

Pero la mejor noticia es que los procesadores antiguos de AMD también se benefician de estas mejoras; las pruebas con los procesadores Ryzen 7000 han reportado mejoras que pueden alcanzar el 11% en algunos juegos. Incluso se habla de que, teóricamente, algunos procesadores de Intel también se podrían beneficiar del parche, aunque esto no ha sido probado aún.

Para instalar el nuevo parche que mejora el rendimiento de Windows 11, tenemos que pulsar en el menú inicio y entrar en la Configuración. En la parte izquierda, entramos en 'Windows Update', y pulsamos en 'Buscar actualizaciones'; aunque es muy posible que el programa ya muestre un mensaje de que la actualización está disponible. En concreto, nos interesa instalar la actualización KB5041587 que poco a poco está llegando a todos los usuarios.