Google suele unir las actualizaciones de sus diferentes sistemas operativos, aunque no hablemos de la misma versión, o de la misma revisión. Esto es lo que está pasando ahora mismo con el lanzamiento de la última versión estable del sistema de Android Wear.
A la vez que sus móviles (los Pixel y los Nexus) empiezan a recibir Android 8.1 Oreo sus relojes ya tienen disponible la versión estable de Android 8.o, que están usando en beta desde hace unos meses como ya os contamos.
La OTA está llegando a algunos modelos aunque obviamente no todos los del mercado la recibirán.
Misma interfaz con algunas mejoras
Esta actualización está pensada par el núcleo del sistema ya que la versión propia, Android Wear 2.0 se mantiene estable y no cambia su apariencia o usabilidad.
Tendremos algunas funciones añadidas, como la que nos permite bloquear el encendido de la pantalla con un toque, por si estamos en situaciones concretas donde esto nos resulte más un inconveniente que una ventaja.
También podremos configurar la forma en la que vibrará el móvil, si de manera breve, doble o de forma prolongada, para adaptarlo a nuestros gustos.
Por último tenemos un cambio relacionado con el ahorro de batería y es que ya es posible activar el mismo sin necesidad a que el reloj se esté quedando sin energía. Este modo desactiva la vibración, los servicios de localización, el Wifi, los datos móviles, el modo activo de pantalla y las actualizaciones de las apps.
El LG Watch Sport es el primero de los smartwatches con Android Wear que está recibiendo la actualización y habrá que ver si se tarda mucho en recibir la nueva versión en otros relojes.