El modo oscuro es uno de los temas de conversación con mayor tendencia en el mundo de la tecnología. Para muchos, este modo tiene gran importancia en el diseño del sistema y las aplicaciones, mientras que para muchos otros está recibiendo una atención exagerada.
Al margen de las preferencias de cada uno sobre el modo oscuro, lo que si que es cierto es que el propio desarrollo tanto de Google como de Apple tiene mayor profundidad que simplemente cambiar el blanco por el negro y viceversa. Y por ello hoy observamos uno de los pequeños detalles de este modo.
El modo oscuro de Google no es negro, sino gris
El modo oscuro fue para muchos uno de los principales protagonistas de Android Q. Se trata de un modo oscuro que actúa de forma horizontal para el sistema y las aplicaciones de forma totalmente coordinada. El objetivo de esta sincronización está en tener una experiencia unificada, y dicho principio tiene como requisito imprescindible seguir un lenguaje común de diseño.
Material Design es la línea de diseño que lleva años con nosotros, la cual terminó derivando en Google Material. Cualquier desarrollador que siga estas directrices podrá crear una aplicación que esté al nivel de las aplicaciones de la propia Google, al menos en términos de diseño.
El modo oscuro no es solo un cambio de color, sino un nuevo lenguaje de diseño.
Una de las populares creencias sobre el modo oscuro es que, para aprovechar las bondades de las pantallas OLED, es necesario que el fondo sea completamente negro. Esto parte de la teoría de que este tipo de pantallas representan el color negro apagando los píxeles por completo. La propia Google demostró el impacto de esta decisión en términos de batería.
Pero a la hora de la verdad, las guías de diseño de Google no utilizan el color negro únicamente, sino una serie de grises que forman parte de lo que podríamos llamar una paleta de colores Material Dark. Hay varias razones para utilizar los grises, y Google detalla algunos de estos aspectos en su web.
Una de las decisiones más inteligentes del uso del gris es tener un contraste mínimo que sufren las pantallas OLED cuando desplazas texto blanco en un fondo completamente negro, y es que percibes como una especie de trazado de colores molesto. Este efecto es causado por un pequeño retardo que tienen los píxeles OLED para pasar del apagado por completo a un estado de encendido.
Si consultas las guías de diseño y cursos de Google descubrirás que la paleta de grises tiene varios significados más, como la capacidad para generar efecto de profundidad en los componentes o cual es la conversión correcta de un acento de color en modo claro a modo oscuro. Tiene mucha ciencia.
Pero existe algo más…
El gris que utiliza Google no tiene un impacto significativo en la batería
Lo que nos dice la teoría sobre el modo oscuro y su ahorro de la batería está relacionado con mantener los píxeles en un estado apagado. Toda esta demostración y alarde de conocimientos de diseño usando tonos de grises por parte de Google parece interesante. ¿Pero donde queda el consumo de batería si al final van a estar todos los píxeles encendidos?
Pues en XDA Developers no solo se han planteado esta cuestión, sino que además han hecho pruebas reales de consumo de batería, en las que comparan el negro absoluto con el gris de fondo escogido para Material Dark.
Para representar el Material Dark, Google utiliza un blanco con una luminancia del 0,3%, marcando una diferencia del consumo de una pantalla de 401,2 mW respecto a 400 mW del color oscuro. Un incremento de consumo totalmente despreciable para los beneficios que aporta utilizar este gris como fondo.
Un 0,3% de consumo no es significativo para los beneficios que representa.
Como hemos podido observar, el modo oscuro es mucho más complejo de lo que podemos pensar. No es un simple cambio de color en el fondo, sino una expansión completa de las líneas de diseño en interfaces gráficas.