Los dos aparatos que jamás deberías enchufar en la misma regleta: adiós a un error común en España
Las regletas, que permiten conectar varios aparatos a la vez, pueden convertirse en un riesgo si no se utilizan adecuadamente.
Para evitar posibles accidentes en el hogar que puedan derivar en un incendio, es importante tener en cuenta una serie de recomendaciones básicas, entre ellas la de evitar la conexión de dos aparatos que nunca deberían estar conectados juntos en una regleta.
Las regletas se han convertido en un elemento imprescindible en todos los hogares, pues hoy en día disponemos de una gran cantidad de dispositivos electrónicos que necesitan estar conectados a la corriente, como ordenadores, televisores, cargadores de dispositivos móviles y mucho más.
Sin embargo, en muchas ocasiones no se utilizan de la forma que deberían, lo que implica una serie de riesgos para los propios equipos que se encuentran conectados a ellos, como para la propia vivienda. Un exceso de dispositivos enchufados a la misma regleta puede provocar una sobrecarga, y esto podría llegar a derivar en un incendio.
Para que no suceda ningún problema de este tipo, se debe evitar conectar la plancha y el aire acondicionado al mismo tiempo en la regleta. El primer aparato necesita una potencia de entre 1.000 y 3.000W, en función del modelo, y por su elevado consumo de energía, puede llegar a provocar una sobrecarga de una regleta que no tenga capacidad suficiente para ello.
Por su parte, en los aires acondicionados, los modelos más pequeños suelen necesitar de entre 1.500W y 2.000W, mientras que los mayores consumen por encima de 4.000W. Por lo tanto, cuando se conectan ambos aparatos a la misma regleta, se puede llegar a provocar un cortocircuito e incluso un incendio, además de que los propios electrodomésticos y aparatos se pueden llegar a dañar.
Cosas que nunca deberías hacer con una regleta eléctrica
Las regletas son una herramienta de gran ayuda en casas y oficinas, siendo una buena forma de poder aumentar el número de enchufes en la vivienda o para conectar dispositivos cuyo cable no llega al conector más cercano. Sin embargo, es importante utilizarlas siguiendo unas normas de seguridad básicas.
A medida que ha ido creciendo el uso de diferentes dispositivos y electrodomésticos en las viviendas se han ido necesitando más tomas de corriente, y es que habitualmente ahora se dispone en un mismo espacio de un ordenador, uno o varios monitores, el cargador de móvil, una lámpara, etcétera, y en la mayoría de los casos no se disponen de suficientes enchufes para dar energía a todos ellos, lo que implica la necesidad de utilizar regletas.
El uso de las regletas puede, además, suponer un importante ahorro de energía cuando estas disponen de un interruptor, pues se podrá cortar la corriente de todos los dispositivos que no están en uso con solo pulsar un botón. Actualmente, se pueden encontrar diferentes modelos entre las que elegir, variando tanto el número de todas como su capacidad, la presencia de interruptor general o individual, etcétera, de forma que cada usuario puede encontrar la regleta más apropiada para sus necesidades y preferencias.
Entre las principales recomendaciones de los fabricantes, para utilizarlas de una forma segura y sin riesgos, hay que destacar las siguientes:
- No conectes una regleta a otra: una de las prácticas más habituales en los hogares es la de conectar una regleta a otra para poder disponer de un mayor número de tomas, o bien porque el cable de una regleta no es lo suficientemente largo, si bien es algo que no se debería realizar, puesto que puede ser muy peligroso. De hecho, la mayoría de los fabricantes desaconsejan hacerlo por el alto riesgo de incendio que supone.
- No sobrecargues la regleta: cada regleta tiene una capacidad máxima de carga, por lo que esta no debería excederse. Sobrecargarla supone un alto peligro de incendio, pues podría derretir el plástico y dañar objetos cercanos, así como dispositivos que se tratan de cargar con esa misma regleta, que estarían en un gran riesgo con esta práctica.
- No se debe situar cerca de alfombras o cortinas: por norma general, conviene evitar colocar las regletas de enchufes cerca de alfombras o cortinas que puedan arder fácil y rápidamente, pues el propio movimiento de la electricidad puede acabar por generar calor o provocar alguna chispa si no está bien conectado, con el riesgo que ello supone.
- Evita conectar aparatos de belleza: los alisadores, planchas, secadores o rizadores son muy habituales en los baños, y su uso supone un riesgo de incendio por tener un alto voltaje y alcanzar temperaturas muy elevadas. Conviene no utilizar una regleta para conectarlos, porque el riesgo de incendio aumentará notablemente.
- No las uses en zonas húmedas: la gran mayoría de las regletas de enchufes no se encuentran preparadas para la humedad o para que pueda caer agua encima de ellas, por lo que algunas estancias del hogar como cocinas o baños no son el mejor lugar para ubicarlas, y convendría evitar su uso por completo en ellas.
- No se deben utilizar al aire libre: relacionada con la anterior, nos encontramos con la recomendación de no utilizar las regletas de enchufe al aire libre, en terrazas o jardín, pues se correrá el riesgo de que pueda llegar a mojarse y provoque daños tanto en los aparatos conectados a ellas como en la regleta. En el caso de que sea necesario usarlas en estos lugares, habrá que buscar modelos específicamente creados para resistir las condiciones del clima y la humedad.
- Alejadas del alcance de los niños: por último, hay que recordar la importancia de no dejar las regletas al alcance de los niños, ya que es un gran riesgo que se puedan poner a jugar con aparatos eléctricos.