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Cuando me dijeron que yo sería el encargado de hacer el análisis de este miniproyector de ZTE me alegré. Siempre me ha gustado experimentar con nuevas tecnologías, accesorios y dispositivos. En este caso, un miniproyector dotado con Android y pantalla táctil despertó mis ganas de ‘toquetearlo’ en cuanto lo tuviera en mis manos.

Hablamos de un dispositivo destinado para esos usuarios que suelen hacer presentaciones en el trabajo o ante otros clientes o bien, para los más cinéfilos. Yo, como aficionado al séptimo arte, lo he disfrutado bastante. Pero creo que no merece tanto la pena cuando vemos su precio y lo que ofrece. Para esto un buen proyector con mejor calidad suele rondar este precio. Lo que pagas, es el precio por la comodidad y el diseño.

Estamos ante la primera review de un miniproyector con Android en El Androide Libre. ¡Vamos allá!

ZTE SPRO 2

8,0
  • Pantalla de 5"
  • Snadpragon 800
  • Cámara de - Mpx
  • Batería de 6.300 mAh
  • 2 GB de RAM
  • 16 + microSD hasta 2TB GB de Almacenamiento
  • Peso: 526 g
  • Dimensiones: 134x131x33
  • Resolución de 1280x720
  • Más especificaciones Menos especificaciones
PVP 699€
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Nos gusta
  • Diseño elegante
  • Muy cómodo de transportar
  • Capacidad de conectarse por USB, HDMI y Miracast
No nos gusta
  • La interfaz de usuario no concuerda con el diseño
  • Potencia del altavoz
  • Batería insuficiente para una película completa
ZTE

Hardware: Lo justo y necesario para un proyector

Este ZTE SPRO 2 no necesita de las más altas prestaciones para su funcionamiento ni para proyectar contenido. Por ello tenemos un modelo de procesador antiguo, 2GB de RAM y un almacenamiento interno justo pero claro está, ampliable por SD (adaptador + microSD).

No sólo es un proyector sino que cuenta con una pantalla de 5 pulgadas para poder controlar el dispositivo que viene dotado con Android. Por lo que necesitaremos también cierta potencia para que nosotros como usuarios no tengamos problemas para manejar el dispositivo.

A continuación os dejamos las especificaciones técnicas de este miniproyector de ZTE:

  • Pantalla táctil de 5,0″ pulgadas en resolución HD (1280×720)
  • Procesador Qualcomm Snapdragon 800 (MSM8974) de cuatro núcleos a 2,1GHz
  • Memoria RAM de 2GB
  • Almacenamiento interno de 16GB ampliables por tarjeta SD (microSD + adaptador) hasta 2TB
  • Sensores de luz ambiente, acelerómetro y proximidad
  • Reproducción multimedia: Audio: PCM,AAC,AAC+, eAAC+, AMR-NB/WB, EVRC, MP3, QCELP y vídeo: MPEG4, H.263. H.264
  • Luminosidad de hasta 200 lúmenes conectado a la red eléctrica y tamaño de imagen de más de 100 pulgadas
  • Conectividad: Wi-Fi 802.11 b/g/n/ac, Bluetooth 4.0, Soporta frecuencias WiFi de 2.4G y 5G, MIMO
  • Puertos: USB 3.0 y HDMI
  • Android 4.4.2 KitKat
  • Batería de 6.300mAh
  • Tamaño: 134 x 131 x 33 mm
  • Peso: 526 gramos

El miniproyector con Android más bonito del mercado

Uno de los reclamos más importantes que tiene este miniproyector en comparación con el resto es su diseño. Estamos ante un dispositivo fabricado en plástico pero con un tacto muy conseguido a metal esmerilado. Da un muy buen tacto cuando lo llevamos a las manos y la vista es realmente bonito. Los botones de control de volumen de su lateral y el botón de bloqueo sí son fabricados en metal.

En su parte superior tenemos una pantalla de 5 pulgadas que nos permite controlar perfectamente el dispositivo. Reacciona bien a las pulsaciones y los ángulos de visión son buenos. Aunque no sea un factor importante, la resolución HD en esta pantalla de 5 pulgadas dan buenos resultados.

Vamos a darle un repaso a todo el dispositivo. En la parte frontal contamos con la pantalla de 5 pulgadas rodeada de un marco negro que contraste en gran medida con el color metálico. Decir que en la parte inferior contamos con botones capacitivos fuera de la pantalla para controlar el dispositivo, así tenemos la barra de navegación característica de Android. Debajo de la pantalla, tendremos un botón que no actúa como el botón «Home» sino como el botón de bloqueo o power.

En su lateral derecho tenemos una especie de rejilla por donde saldrá el aire que disipe el SPRO 2. Algo comprensible cuando hablamos de un proyector y el trabajo que tiene que hacer para convertir una imagen en una proyección en la pared. Por el otro lado contamos con el control de volumen. Dos botones con los que subirlo y bajarlo.

Por la parte superior encontramos el proyector y un sensor de proximidad para poder enfocar y ajustar la imagen según la distancia. No me ha gustado la enorme facilidad que tiene para dejar las marcas dedos y lo que cuesta quitarlas a veces.

Detrás, tenemos los puertos que son: HDMI, USB 3.0, Jack de 3,5mm y un puerto de carga que no es microUSB. Y por último debajo, tenemos los altavoces estéreos y dos patas que podemos desplegar para alzar un poco el proyector. Aunque también podemos colocarlo en un trípode porque cuenta con una rosca para ello.

Si hablamos de reproducción de vídeo en un proyector, es muy de esperar que se incluya un mando a distancia. Pues como cabría esperar, el ZTE SPRO 2 incluye un mando a distancia con un buen diseño, ligero y fácil de usar. Tenemos todo lo necesario. Control de la barra de navegación, exploración por los menús a través de la rueda que incluye, control de la reproducción y de volumen. También podemos ajustar el brillo o bloquearlo para que apague la pantalla.

Estamos ante un miniproyector que no es más grande que una mano, liviano dentro de lo que cabe y fácil de transportar. Además cuenta con un diseño elegante y con un buen tacto a la hora de usarlo. En este aspecto, buen gusto ZTE.

Una calidad de imagen aceptable tanto en 40 pulgadas como en 100

El punto más importante a la hora de hablar de un proyector o en este caso, un miniproyector es la calidad de imagen que ofrece. En este caso podremos proyectar contenido como si fuese una pantalla de 5 pulgadas o más de 100. Como podréis ver en las imágenes, la imagen ocupaba toda una pared de mi casa y la calidad era buena.

Este ZTE SPRO 2 tiene una potencia de hasta 200 lúmenes si lo tenemos conectado a la red eléctrica. Si lo usamos sin conectar el brillo baja hasta los 100 lúmenes con el fin de aumentar la autonomía del dispositivo. En ambos casos obtenemos unos buenos resultados en la proyección de la imagen.

La lámpara de un proyector es algo que preocupa a muchos usuarios. Un reemplazo de ésta puede suponer un desembolso de dinero cuantioso. Si hablamos de la que incluye este ZTE SPRO 2 nos asegura hasta 20.000 horas de reproducción de imagen. lo que se traduce en más de 2 años. Da tiempo a ver bastantes películas, ¿no?

La relación de aspecto es algo importante a la hora de proyectar contenido. Este dispositivo es capaz de reproducir en 4:3 o en 16:9. Algo importante cuando queremos mostrar las fotografías de nuestras últimas vacaciones o ver una película.

Me ha gustado el enfoque automático. Es colocar el proyector apuntando a la superficie y en cuestión de un par de segundos la imagen se ve nítida. Aunque lo que más me ha sorprendido es su capacidad para adaptarse a la superficie. Digamos que si apuntas hacia la parte alta de una pared, la imagen que se proyecta es como si se estuviera justo delante sujetando el dispositivo horizontalmente. No se deforma.

La resolución de la imagen que obtenemos en la proyección es HD. Algo que no repercute tanto como parece en la reproducción de contenido en toda una pared.

Buena nitidez en el sonido pero falta un poco de potencia

Antes de recibir este ZTE SPRO 2 no sabía si contaría con altavoces integrados o si por el contrario tendría que conectarle unos propios. Finalmente el resultado fue que incluía ya dos altavoces integrados con tecnología Dolby. Altavoces que aunque no ofrezcan una potencia y calidad de un cine, sí que te permite ver una película en casa y enterarte.

Si ponemos al máximo el nivel de volumen podremos enterarnos ya que es muy similar a la potencia que puede ofrecer un LG G4 por ejemplo. Sólo que la calidad es mejor al ser un altavoz estéreo y con una tecnología Dolby. Aunque algo más de potencia y un ajuste mejor de los graves harían que vibraras más con cada película. Algo frío me he quedado dándole un repaso a la saga Star Wars antes del estreno.

Pero si en casa contáis con un buen Home Cinema no hay problema porque no va a quedar en el olvido. Conectando el cable jack de 3,5 al proyector podremos convertir nuestro salón en una sala de cine.

Android, sí, pero modificado

Con respecto al software que mueve todo este dispositivo tenemos Android como bien dijimos junto con el resto de especificaciones. Eso sí, una versión de Android modificada para adaptarse a un miniproyector. Hablamos de una pantalla que funciona siempre en horizontal y por tanto, las páginas de inicio tienen que funcionar así.

Una vez iniciamos el dispositivo nos encontramos con grandes iconos y algunos widgets. Desde la primera página podemos activar el proyector, habilitar/deshabilitar el auto-enfoque y controlar el brillo. Luego contamos con aplicaciones instaladas como las de Google, un reproductor, Dolphin y Chrome como navegadores, galería de fotos, ES File Explorer, Dropbox y más.

Todas ellas agrupadas en dos pestañas: Multimedia y Oficina. También podemos irnos a los Ajustes para configurar tanto el proyector como el sistema. Algo que me ha gustado es la posibilidad de crear más pestañas para organizar todas las aplicaciones.

Todo esto está bajo una interfaz modificada y más fácil de usar para cualquier usuario que quiera ver una película como si fuese un cine en el salón de su casa. En las capturas podréis ver que es muy simple de usar, centrado en la reproducción de contenido. Aunque sí he de admitir que me parece que el sistema operativo resta la elegancia que ofrece el diseño. Algo más parecido a la interfaz Metro de Microsoft en cuanto a minimalismo con iconos modificados o más sobria encajaría mejor con el diseño exterior.

En resumen, es Android con otra interfaz. Contamos con un centro de notificaciones dotado de una barra de accesos directos. Aquí podremos apagar y encender el proyector, configurar el brillo, elegir si quieres retransmitir archivos de otro dispositivo por Miracast, HDMI o conectando un dispositivo de almacenamiento USB.

Experiencia de uso

Ahora toca hablar de mi experiencia personal con este miniproyector de ZTE. En general me ha dejado un buen sabor de boca. Con la ayuda de una manta blanca que tengas por casa puedes convertir tu salón en toda una sala de cine. Y si ya tienes unos altavoces por casa pues mejoras la calidad auditiva y puedes disfrutar aún más de una buena película.

Un punto clave en mi opinión es su rosca para trípodes. Tengo uno y era mucho más fácil colocar el proyector adecuadamente. Si os queréis comprar este proyector y un trípode, os dejo aquí el que yo tengo.

He probado este proyector con un disco duro externo conectado, un HDMI desde mi ordenador y, agarraos al asiento, a una consola PS4. En todos los casos he obtenido un buen resultado en cuanto a la calidad de imagen. Es cierto que lo vemos todo en resolución HD pero compensa esta leve pérdida de calidad si conviertes tu pared en un televisor, ¿no?

Para los que se preocupan de la tasa de frames del vídeo, tengo malas noticias. Este proyector no es capaz de reproducir vídeo a 60 fps. Eso quiere decir que si conectamos un PC o PS4 con la intención de jugar a 720@60fps, puedes ir olvidándote. Podrás jugar a 720@30fps pero eso sí, en una pantalla enorme. Si te compensa esa pérdida de frames por segundo con un mayor tamaño, adelante, a mi no me compensaba y por eso sólo quedó en una prueba.

Tengo que decir que me ha resultado sumamente práctico que tenga incluido Android. Pude instalar Plex y reproducir contenido de mi servidor multimedia, ver vídeos de Youtube sin problemas y si tuviera Netflix (mi suscripción caducó al poco de recibir el dispositivo) también podría aprovecharse. Si a esto le añadimos que soporta conexiones por HDMI o reproducir contenido de un dispositivo USB, podemos decir que es un miniproyector completo.

Batería insuficiente para ver una película de principio a fin

Voy a estar fuera de casa, tengo el ZTE SPRO 2 completamente cargado, ¿puedo dejar el cargador en casa si voy a ver una película con amigos? La respuesta es no. Voy a ver vídeos varios de Youtube o hacer una presentación en el trabajo, ¿puedo? Entonces sí.

Aunque este dispositivo ajuste el brillo máximo a 100 lúmenes, la batería de la que dispone no nos asegura acabar una película. Si tenemos en cuenta que una película tiene de duración media entre 2-3 horas y que este SPRO 2 es capaz de proyectar durante poco más de 2 horas de forma continua, no es seguro que la acabes. En mi caso empecé con «12 años de esclavitud» y cuando faltaba una media hora ya me saltó el aviso de 5% de batería. El cargador no es excesivamente grande, es muy parecido al que traen la mayoría de portátiles. Por lo que no es muy molesto transportarlo junto al proyector y su mando.

Conclusión: Buen dispositivo pero no tan buen precio

Tras probar este ZTE SPRO 2 me he dado cuenta de la cantidad de funcionalidades que puede tener un miniproyector. Si eres un cinéfilo puedes convertir tu salón en todo un cine. En mi caso fue el uso principal que le di. Las reproduje desde la misma aplicación de Plex, desde mi disco duro externo y directamente desde mi ordenador portátil.

Por otro lado, un punto muy negativo en este dispositivo de ZTE es su precio. Pocos, muy pocos, son los que pasarán por caja para comprar este SPRO 2 por los 699€ que cuesta. Para ello tenemos alternativas que ofrecen una mejor calidad de imagen de hasta FullHD y la mitad de precio. No tendremos Android pero sí un puerto USB o HDMI para conectar un disco duro externo o un dispositivo Android por MHL. Creo que a no ser que bajen su precio de venta, este SPRO 2 puede quedar casi en el olvido.

ZTE vio camino libre en el sector de los proyectores con Android con la primera versión del SPRO y por lo visto, ven beneficios ya que tenemos una segunda versión. Estamos ante un producto con un precio elevado y no asequible para todos los bolsillos. En internet podemos encontrarlo por un precio oficial de 699 euros (en Amazon está algo más barato). Pero hay que tener en cuenta que estás pagando por portabilidad y tener Android integrado. Si eres un verdadero cinéfilo y te gusta disfrutar de la máxima calidad, este proyector puede no satisfacer tus necesidades. Mientras que si buscas algo portátil y de dimensiones reducidas, puede ser una opción a tener en cuenta.