El concepto Smart Home lleva ya un tiempo con nosotros, y poco a poco va ganando presencia. Cada vez hay más dispositivos disponibles, destinados a hacer de nuestra casa un hogar inteligente. Probablemente muchos de vosotros tengáis ya algunos de estos dispositivos (desde altavoces inteligentes, a luces como las Philips Hue, electrodomésticos con asistente, termostatos…). La selección de dispositivos ya es bastante amplia y cada vez más accesible.

Pese a que hay mucho entre lo que elegir, es habitual no tener la sensación de que estás más cerca de tener una Smart Home en nuestra casa. Lo que plantea la duda de si estamos usando estos dispositivos de una forma equivocada. Incluso si tal vez estos dispositivos no sean la forma adecuada de hacer nuestro hogar más inteligente.

El concepto de Smart Home

Uno de los problemas más habituales es que el concepto de Smart Home se interprete de una manera diferente para las personas, lo que hace que no se tenga una idea clara. Un hogar inteligente es uno en el que debido a los sistemas y dispositivos que hay, se ofrecen a las personas que lo habitan funciones que permiten ahorrar energía, costes, tiempo. En general vivir de una forma más cómoda, porque ciertos procesos son más simples o incluso se automatizan.

Es habitual que cuando salimos del mundo de la tecnología, si escuchamos la palabra Smart (inteligente, listo), lo asociemos a resolver un problema de manera rápida. Muchas personas esperan entonces que un hogar inteligente, con dispositivos como un altavoz o una máquina de café compatible con uno, les ayuden a ganar tiempo. A que se tarde menos en completar algunas tareas cotidianas. Tener una taza de café lista cuando te levantes, porque tienes una máquina que te da dicha opción, ahorra tiempo. Pero no es una acción que realmente esté solucionando un problema.

Una máquina de café de este tipo, siguiendo este ejemplo, es algo de utilidad. Te ahorra ese tiempo que normalmente pasas preparando el café, para que puedas hacer otras cosas, que pueden ser más importantes. Ese ahorro de tiempo forma parte del concepto Smart Home, pero en este caso no parece ser algo de una magnitud especialmente relevante para las personas, o no se acerca a esa idea de lo que muchos esperan de un hogar inteligente.

Acercándonos a dicho concepto

Este tipo de dispositivos que se usan en la actualidad generan dudas, sobre cuál es entonces realmente el concepto de Smart Home, si estamos haciendo un buen uso o si estamos cerca de este tipo de hogar inteligente. Los dispositivos actuales son un movimiento o paso en la dirección correcta, permitir simplificar ciertos procesos o acciones, ahorrando tiempo al usuario. El primer paso se ha dado ya, pero debería ir más allá.

Se espera que haya dispositivos que vayan a poder realizar tareas que el usuario no quiere, aquellas tareas cotidianas que en muchos casos se ven como una pérdida de tiempo, pero tenemos que hacer (la colada, fregar los platos, etc). Si bien tenemos ya aparatos que nos ayudan como un lavavajillas, cuando llega el momento de crear tu propia Smart Home, es bueno fijarse en qué tareas son las que más tiempo consumen y qué dispositivos o aparatos son las que mejor llevan a cabo dicha tarea.

Un buen ejemplo en este sentido son los robots aspirador. Este tipo de dispositivos se encargan de llevar a cabo una tarea que consume mucho tiempo, como tener que aspirar, barrer o fregar el suelo en casa, sin que el propio usuario tenga que hacer nada. Lo único necesario es programar en su aplicación cuándo queremos que empiece a limpiar. Es uno de los mejores ejemplos, ya que el usuario no tiene que hacer nada más, puede dedicar su tiempo a otras cosas con tranquilidad, que el suelo de casa quedará perfectamente limpio una vez haya pasado el robot.

Puede que un robot aspirador sea un buen paso, para eliminar de tu planificación una tarea que consume mucho tiempo, incluso puede que ahorrar energía o costes en casa. Esto es algo que se acerca mucho más al concepto de Smart Home que muchos tienen en su mente, y no unas luces que cambian de color usando una app, por ejemplo. La duda es si la industria se moverá en esta dirección o si nos vamos a encontrar con muchos dispositivos que realmente no necesitamos o no nos ayudan a que nuestra casa o nuestra vida sea algo más cómoda.