Pese a que hay varias comunidades IPTV en España que ofrecen canales gratuitos de televisión, no siempre se dispone de conexión WiFi o de internet móvil para poder ver este tipo de contenido, y lo más importante: a veces apetece verlo en un televisor. Y no todos son modernos dispositivos con sistema operativo propio y tienda de aplicaciones.
En estos casos, la TDT sigue siendo la mejor opción para disfrutar de una emisión continua de contenido, puesto que no requiere que el usuario gaste datos, y permite utilizar el móvil mientras tanto para llevar a cabo otras tareas. En definitiva, la televisión sigue contando con bastantes ventajas respecto al streaming. Eso sí, para poder verla en modelos antiguos, será necesario un decodificador.
A partir del pasado 14 de febrero, todos los canales en España están obligados a transmitir a resolución HD. Esto está provocando que, los modelos de televisor —o decodificador— que no puedan recibir la transmisión a esta resolución no podrán ver correctamente la televisión, y tendrán que adquirir uno de estos dispositivos.
¿Qué requisitos tiene la nueva TDT?
No todos los modelos de decodificador y televisor necesitarán ser sustituidos por un nuevo dispositivo para poder seguir viendo la televisión. En teoría, solo serían algunos modelos comprados antes de 2015, puesto que, a partir de ese año, todos los dispositivos debían permitir sintonizar canales en alta definición. Si ese es el caso, basta con volver a sintonizar para recibir los canales que falten en HD,
Este cambio implica la desaparición de los canales SD, por lo que, si al utilizar el encender la tele no se pueden ver canales, quiere decir que hay que comprar un televisor o un decodificador. Esta última es la opción más barata, y permite aprovechar al máximo la tecnología que hay en casa. Eso sí, la antena del edificio también debe ser compatible.
A la hora de comprar un nuevo decodificador TDT, el único requisito es que tenga soporte para HD. Este se podrá conectar por HDMI o por euroconector al televisor, y aquí ya depende del dispositivo en el que se vaya a transmitir. Si solo se puede utilizar una de estas conexiones, hay que asegurarse de que ambos dispositivos tengan la misma.
Algunos modelos recomendables
Para poder seguir disfrutando de la televisión digital terrestre, solo queda comprar un nuevo televisor, o bien hacerse con un decodificador que soporte la resolución HD y tenga la misma conexión de vídeo del modelo al que se quiere conectar. Por tanto, la mejor opción es comprar un modelo que tenga tanto HDMI como euroconector.
Uno de los mejores modelos en relación calidad precio es el Strong SRT8213, que puede sintonizar todos los canales actuales y es compatible con Dolby Digital Plus. Además, cuesta menos de 25 euros en Amazon y cuenta con un puerto USB al que se puede conectar un disco duro o una memoria para reproducir contenido desde ahí.
Por otra parte, en El Corte Inglés también se pueden encontrar modelos como el Nordmende ZAP26510ND-L, que, en un tamaño muy contenido, es capaz de ofrecer las mismas características, aunque en este caso por un precio de 34,99 euros. Otra alternativa que tiene sintonización automática, un puerto USB, HDMI y euroconector es el Giga TV HD250T, disponible en Carrefour por 49,24 y que, en este caso, cuenta incluso con grabador para guardar los programas favoritos.