Las tablets poco a poco se están ganando un hueco dentro del mercado de los dispositivos móviles y lo vemos cada vez más con la variedad de modelos que están saliendo. Paralelamente a esta evolución aparecen dudas de bastante gente sobre si comprar o no una tablet, teniendo en cuenta los usos que van a darle.

Son muchas las personas que me han planteado esta pregunta (es lo que tiene ser un Geek) y generalmente suelo dar las mismas respuestas y/o soluciones: depende de para lo que se vaya a usar es mejor o no, así que aquí os vamos a dar 10 razones por las que puede ser mejor adquirir una tablet antes que un PC.

Portabilidad

No hay duda de que una de las ventajas que tienen las tablets frente a un ordenador es su portabilidad; su reducido peso y tamaño hacen de este gadget un dispositivo muy fácil de manejar que podemos llevar a casi cualquier parte sin que ello suponga una carga extra, como sí puede ocurrir con un portátil, por ejemplo. Según el tamaño nos cabe perfectamente en la maleta o en una bandolera.

Autonomía

Otro punto muy interesante es el hecho que la batería dura, en general, bastante más que en un portátil. Una tablet puede durar cómodamente todo un día de uso, cosa que con un portátil es difícil de conseguir. En mi caso, con una Note 10.1 he llegado a conseguir una duración de 10 horas de uso continuado e intenso. Si contamos todo el tiempo que no la estamos usando, podemos llegar fácilmente a los 2 días.

Arranque instantáneo

Otro de los grandes “avances” es el arranque instantáneo que permiten, y es que al estar siempre en reposo es como “despertar” un móvil, por lo que no hay ningún tiempo de arranque de sistema ni nada parecido. Es cierto que los MacBook ofrecen un arranque desde la suspensión realmente rápido, pero aún así no tiene nada que ver, y si hablamos de Windows ya la cosa cambia considerablemente.

Potencia suficiente

Por norma general mucha gente que me pregunta qué hacer usa el ordenador para poco más que navegar por Internet, Facebook, Youtube y consultas varias. Dejando de lado el tema ofimático (necesario para casos puntuales o para casos más concretos), para cubrir esas necesidades no necesitamos un ordenador extremadamente rápido, por lo que una tablet nos solventa ese problema de una manera más que suficiente, además de que también generalmente suele ser más cómodo. Por otra parte, en caso de querer jugar, hoy en día la potencia que ofrecen y los juegos disponibles poco tienen que envidiar a los PC’s (salvando siempre las distancias).

Precio más reducido

Aquí puede haber discrepancias, pero generalmente también suele ser más económica una tablet que un PC. Una tablet como la Nexus 10 cuesta 400€, y otra más que decente como la Galaxy Tab 10.1 ronda los 300€. Cierto es que hay ordenadores por 400€, pero son a los portátiles como una tablet de 100€ frente a una de 400€: poco o nada tienen que ver en cuanto a rendimiento se refiere.

Comodidad de lectura

Otro punto a favor es que podemos llevar con nosotros nuestros libros electrónicos y leerlos en cualquier parte. Esta ventaja gana mucho si hablamos de tablets de 7”, ya que tienen el tamaño ideal para ser sujetadas con una mano y a diferencia de leer con un móvil, la batería de éstas no se resiente tanto al tener la pantalla encendida durante períodos prolongados. Además de eso siempre podemos leer apuntes, PDF’s o cualquier documento que tengamos, todo ello con una comodidad magnífica. Para repasar los apuntes de la universidad o terminar de preparar esa presentación va muy bien.

Estación multimedia

La capacidad multimedia de las tablets es más que reconocida: con ella podemos ver películas, escuchar música, ver fotos, youtube, hacer videoconferencias… Un gran número de posibilidades están a nuestro alcance en un reducido espacio. La calidad de las pantallas llega generalmente a los 720p de resolución en la mayoría de los casos, y la rapidez con la que accedemos a todo ese contenido multimedia es innegable. Si además podemos hacer una videoconferencia gracias a su cámara frontal sentados en el sofá o con un simple cable conectar la tablet a la tele tenemos una estación multimedia móvil magnífica.

Poder tomar notas

Este es un punto algo más específico y no necesario para la mayoría, pero siempre viene bien poder “escribir a mano” sobre algún documento o tomar una nota de forma rápida (aunque no sea a mano). Más de una vez nos hemos anotado algo en una servilleta que hemos metido en el bolsillo y, por alguna extraña razón, a terminado en la lavadora. Si anotamos lo que sea en nuestra tablet sabemos seguro que no se va a perder, y si lo hacemos con la aplicación adecuada, lo tendremos disponible en nuestro ordenador de manera automática, así seguro que no se pierde nada.

Variedad

Y a todo eso hay que añadir que tablets hay de muchos tipos y de muchas gamas en función de nuestras necesidades. Tamaños, capacidades, rendimiento, precios, diseños…El rango de mercado que ofrecen es muy amplio y ese es un punto a su favor. Si necesitamos una tablet más grande o más pequeña la podremos encontrar, y luego está la diferencia que cada marca añade en cuanto a diseño o funcionalidades se refiere, siendo Samsung de las que más opciones ofrece en cuanto a su usabilidad, pero si necesitamos algo más simple, tenemos muchas opciones donde elegir.

Versatilidad en general

En general, la versatilidad que ofrecen estos dispositivos es lo que los diferencia de los ordenadores, ya que se pueden mover en muchos campos y situaciones en las cuales un PC es incapaz de hacer. Pero una cosa hay que dejar clara: una tablet puede ser un sustituto de un ordenador en casos como los mencionados, pero no para alguien que se dedica a la edición de vídeo, fotos, necesita una suite ofimatica completa porque debe hacer trabajos y/o presentaciones o alguien que quiere jugar al WoW, por ejemplo.

Debemos tener en cuenta que cada cosa tiene sus extremos, pero en situaciones concretas (y muchas veces las más comunes) sí puede ser una buena alternativa, si estamos pensando en comprar un nuevo ordenador, revisar las tablets disponibles ya que nos pueden solventar de sobras nuestras necesidades.