Más allá de que pueda ser inspiración o una adaptación descarada, Instagram Stories es casi calcada a Snapchat. Tanto, que el servicio propiedad de Facebook mantiene gran parte de la complicación en la interfaz: subir una historia puede ser un caos; sobre todo para alguien no acostumbrado a Snapchat. Y como yo fui uno de los que tuvo ese problema me dije: ¿por qué no hacer una guía para Instagram Historias?
Instagram Stories o Historias es un apartado dentro del propia Instagram en el que podremos subir fotos o vídeos con una condición básica: permanecerán activos durante 24 horas. Esto añade un componente efímero al contenido, por lo que puede servir para mostrar qué hemos hecho en el último día. Dicho contenido es público o restringido a según qué personas, podremos decidirlo en todo momento.
Las Historias quedan aparte del muro de Instagram en forma de icono superior con el avatar del usuario. Allí se van acumulando las que se hayan subido en las últimas 24 horas: basta pulsar sobre una para que se reproduzca. Cada reproducción se divide en diferentes secciones o streams: de más antiguas a más modernas. ¿Quieres exprimir tu creatividad? Veamos cómo conseguir las mejores Historias de Instagram.
Crea fotos o vídeos antes de convertirlos en historia
Lo primero es entrar en la opción de Instagram Stories y crear contenido. En la parte superior de la aplicación vemos que aparece el icono de un «+». También se puede entrar en el apartado correspondiente a lo Snapchat: deslizando la pantalla de izquierda a derecha.
La interfaz en este punto es simple: un click sobre el botón de captura y se hace una foto; mantén pulsado y se crea un vídeo. Ojo: el tiempo no se acumula, deberás crear el vídeo de una tirada con un máximo de 10 segundos. Aunque esto es sólo para un stream: la historia se puede componer con varios de estos mini vídeos.
El objetivo de Instagram Stories es crear una Historia compuesta por varios trozos
Ya tenemos el resultado: una fotografía o vídeo sin ningún tipo de retoque. Abajo tenemos tres botones: «Cancelar», que elimina el vídeo creado (ojo con esto, no se puede deshacer); una flecha grande hacia arriba que publica el contenido registrado; y una flecha pequeña hacia abajo que permite guardar el stream. Esto está bien si queréis crear vídeos o fotos editados con Instagram Stories y compartirlos con otra app o el propio Instagram (sin Historias).
Además, resulta posible añadir contenido que hayamos creado fuera de Instagram Stories siempre y cuando se encuentre dentro de las últimas 24 horas. para insertarlo basta con bajar la pantalla hasta que aparezcan las últimas fotos y vídeos guardados en la galería dl móvil.
Como ocurre con Snapchat, los retoques son la parte oculta de la app. Y la más divertida; aunque haya que entenderla primero. Veamos.
Aplica distintos filtros a la foto o vídeo
Basta con deslizar la pantalla hacia los laterales para movernos entro los distintos filtros a modo de carrusel. En estos momentos hay 7 distintos que modifican los colores, las tonalidades, aplican más o menos viveza y dejan elegir entre un modo blanco y negro. Es de esperar que el número de filtros aumente conforme Instagram Stories se haga popular.
Desactiva o activa el sonido
Por defecto, los streams de Instagram Stories tienen el sonido activado. ¿Que no quieres que el vídeo suene? No hay problema: pulsa sobre el icono de altavoz que aparece en la esquina superior izquierda.
Dibuja directamente sobre la pantalla
Una de las mayores posibilidades que trae este modo de compartir contenido efímero es que podremos adornarlo con nuestros propios dibujos. Arriba a la derecha aparece un pincel que permite aplicar cualquier trazo. Como suele ocurrir, hay que ser diestro para crear buenos resultados, pero basta con echarle imaginación. Y color, mucho color.
Una vez pulsado sobre el pincel veremos que abajo aparecen los colores y un pequeño icono a la izquierda para marcar el grosor de los trazos. Arriba tenemos tres tipos de estos trazos: rotulador, subrayador o luminoso. Cada uno crea un efecto especial que, combinado con los colores, ofrece cualquier tipo de dibujo que se nos ocurra.
Si tienes imaginación es posible crear cualquier dibujo con los pinceles y colores
Podremos aplicar tantos dibujos como queramos, incluso cubrir la imagen por completo con ellos. Los trazos son estáticos y funcionan como una capa superpuesta al contenido. Podemos deshacer el último trazo con el botón superior pertinente y desplazarnos entre los colores con scroll horizontal en tres niveles.
Escribe mensajes con letra de imprenta
¿Que no te sale bien escribir a mano alzada? Apuesta por la letra de imprenta. Sólo una fuente y color blanco, en este apartado no se puede elegir. Y un único bloque de texto: si quieres ampliar las palabras deberás combinar con palabras dibujadas.
El funcionamiento es sencillo: pulsa sobre el «Aa» superior y se abrirá el cuadro de texto. Una vez escrito, podrás mover el bloque a cualquier parte de la pantalla. Como es blanco, lo mejor es llevarlo a la zona más oscura del contenido. Y un truquillo: podremos ampliar el texto y rotarlo pellizcando la pantalla.
Cómo insertar emojis en Instagram Stories
Llegamos al punto clave. Si uno de atractivos de Snapchat es el de aplicar stickers, ¿dónde se encuentran en Instagram Historias? La respuesta es sencilla: no hay. Aunque podremos introducir emoji haciendo uso de un teclado que incluya esta opción.
En Instagram Stories no hay ni stickers ni intercambio de caras; aunque seguro que no tardan en aparecer
Basta con que abramos un cuadro de texto e insertemos los emoticonos que nos apetezca. Después resulta posible moverlos a cualquier parte de la pantalla, rotarlos, aumentarlos de tamaño o disminuirlos. No es tan «guay» como los stickers, pero sirve para salir del paso. Seguro que Instagram los incluye próximamente.
Publicación, mensajes y marcado de quién puede ver las Historias
Una vez ya no haya nada que hacer en la foto o el vídeo y el resultado esté a nuestro gusto, sólo resta publicarla con la flecha hacia arriba. El stream quedará guardado en la historia de las últimas 24 horas y aparecerá por orden cronológico. Esto es, cuando alguien vea nuestro Instagram Stories se empezará a reproducir desde el stream más antiguo al más reciente.
Cada historia está dividida en los últimos streams subidos por el usuario. De más antiguo a más reciente
A diferencia del muro principal de Instagram, en las Historias no se permiten los comentarios; aunque sí que se pueden enviar mensajes privados. Cada persona que ve las Historias queda guardado como espectador. Para ver quiénes han reproducido, basta con entrar en la historia concreta y deslizar la pantalla de abajo hacia arriba. También veremos los mensajes recibidos.
¿Que no quieres que los streams sean públicos? No hay problema: desliza la pantalla de abajo hacia arriba una vez estés en tu Historia y marca aquellos usuarios con «Ocultar la historia a». También puedes permitir o no los mensajes.
Instagram Live
Este modo de Historias se añadió recientemente. Como su nombre indica, son vídeos en directo emitidos a través de Instagram. Del estilo de Periscope, aunque con una diferencia que debes tener en cuenta: Instagram Live no mantiene los vídeos, éstos se eliminan una vez terminas la transmisión.
Para acceder a Instagram Live o Instagram Directo basta con que añadas una nueva Historia y te desplaces hasta la opción etiquetada como «Directo». Empieza a emitir y, automáticamente, Instagram notificará a algunos de tus seguidores del comienzo de la transmisión. Quien quiera entrará a verte en directo con la opción de comentar el vídeo en vivo y también marcarlo con un Me Gusta. Una vez termines, el vídeo transmitido desaparecerá de la red.
Instagram Live es efímero por completo. Tampoco existe la opción de guardarlo en la memoria del smartphone una vez terminas, por lo que sólo hay una forma de mantener guardada la transmisión: capturando la pantalla con alguna aplicación para grabar la pantalla.
A Instagram Stories aún le queda mucho camino, pero avanza con paso firme
Es pronto para saber si tendrá o no éxito, pero lo que sí se sabe es que, a igualdad de condiciones, una misma historia consigue más reproducciones en Instagram que en Snapchat. El segundo seguro que mantendrá su estatus, pero no cabe duda de que el mayor volumen de usuarios ayudará a que Instagram Stories se mantenga.
Aún le faltan muchas opciones, sobre todo las relacionadas con la personalización de los vídeos y, por qué no, con el intercambio de caras o «face swapping». Son funcionalidades que irán llegando conforme se asiente el uso; no en vano Facebook dispone de potencial y dinero para conseguirlo.