La administración manual de permisos llegó oficialmente con Android Marshmallow: puedes elegir a qué acceden tus aplicaciones, incluso tras instalarlas.
Cada vez que instalamos una aplicación en el móvil le damos acceso a alguna parte de este para que efectúe su trabajo. Puede conectarse a Internet para bajar nuevos tweets, guardar en la memoria las últimas fotos del grupo de WhatsApp o acceder a la lista de contactos si hacemos de Messenger nuestra app de SMS. Los permisos son vitales para controlar qué ocurre en nuestro dispositivo. Y a menudo los aceptamos sin mirar.
¿Crees que una aplicación se ha propasado pidiendo permisos y ahora no sabes cómo retirárselos? ¿Desconoces a qué acceden cada una de las apps de tu dispositivo? No te preocupes, controlar esta función del sistema es más fácil de lo que parece.
Cómo gestionar los permisos en Android Marshmallow y superior
Con los algodones de azúcar Google introdujo muchas novedades en el sistema, también la gestión de permisos. A partir de Marshmallow sabremos puntualmente qué necesita cada aplicación al instalarse y también al ejecutarse. Podremos aceptarlo o rechazarlo. Y, en el caso de que dijéramos que sí demasiado pronto, también podemos revocarle los permisos.
Para ver a qué está accediendo una aplicación en concreto basta con hacer lo siguiente:
- Acudimos a los ajustes del dispositivo y buscamos en «Aplicaciones».
- Localizamos la app en cuestión y entramos en sus opciones.
- Entramos en permisos y veremos que tendremos acceso a todo lo que pide pudiendo revocar, o admitir, cada uno con su conector.
- Ahora solo necesitas quitar el acceso lo que no quieres que husmee la aplicación.
Esto es muy práctico para controlar las aplicaciones una vez instaladas y también para poder utilizarlas incluso aunque se soprepasen pidiendo. Basta con instalar, acudir hasta los permisos y, antes de abrir la aplicación en cuestión, eliminarle el acceso a los rincones peliagudos, como los contactos o la identidad. Que el control manual esté en manos del usuario le otorga gran parte del poder.
¿Y si no tengo Android Marshmallow o superior?
Entonces dependerá de tu ROM o modelo de dispositivo. Por ejemplo, CyanogenMod (ahora Lineage OS) siempre tuvo un gestor de permisos excelente, dentro del panel de ajustes. O los móviles de Xiaomi, que permiten gestionar el acceso de las aplicaciones a los rincones del sistema. El ajuste funciona de manera similar a Android Marshmallow, puedes encontrarlos en las opciones de tu dispositivo.
Más allá de las versiones más recientes de Android y de las ROMs basadas en Cyano y MIUI no hay muchas posibilidades de que puedas gestionar de manera puntual los permisos. Siempre está la opción de rootear tu dispositivo, pero lo más recomendable es, directamente, desinstalar la aplicación que veas problemática. Siempre encontrarás alternativas mucho más seguras.
Y un último apunte: es conveniente que revises los permisos antes de instalar cualquier aplicación prestando atención a los siguientes.
- Identidad.
- Contactos.
- Ubicación.
- ID de dispositivo y datos de llamada.
- Teléfono.
- Micrófono.
- Cámara.
Si lo que deseas instalar no tiene nada que ver con los permisos citados piénsatelo bien antes de bajarlo. Y nunca aceptes sin mirar lo que te pidan las aplicaciones recién instaladas: gestionar bien los permisos debe ser tu primera barrera de seguridad.