Si tienes una batería de 4000 mAh seguro que no tienes mala autonomía, pero quizá otro móvil con 3000 te gane al final del día. Rimas aparte, ¿el tamaño es lo más importante?
A vueltas con las horas de pantalla y las de recarga, es algo que nos quita el sueño a más de uno. Porque, si tanto ha avanzado la tecnología, ¿por qué no lo hace el tiempo que pasamos entre enchufe y enchufe? No falla: basta con que nos haga falta el móvil para que aparezcan los números en rojo. Y aún quedarán horas para llegar a casa…
El tamaño es importante, resulta obvio, pero no por tenerla más grande acaba durando más. Hablo de la capacidad de la batería, como es obvio: influye, pero otros aspectos también son importantes. ¿Cómo elegir qué móvil tiene la mejor autonomía? Depende de tantos factores…
El uso que hagas del móvil es determinante
Es lo más obvio después de mirar la capacidad en mAh de una batería. Si no usamos el móvil durará más cargado, al menos de manera general. Así que debo recalcarlo: no uses tanto la pantalla si quieres si quieres seguir dándole caña.
Usar el móvil con cabeza es lo primero. No abusar de los juegos, no estar encendiendo la pantalla cada dos por tres para ver si han llegado notificaciones, utilizar una pulsera para ver esas notificaciones… Y vigilar qué aplicaciones devoran mAh para ponerlas en vereda. Nada que no sepas.
La versión de Android influye. Mucho
Google, consciente de que debía corregir el gasto desmesurado del sistema, fue mejorándolo de forma notable. Introducción de Doze para economizar el gasto de las aplicaciones en suspensión, mejora de dicho sistema con la última actualización a Oreo, máquina virtual ART que trajo una manera más optimizada de ejecutar las aplicaciones… Con cada nueva versión el consumo general mejora.
La solución para tener más autonomía sería decir: «Actualiza tu móvil a la última versión de Android». Sí, sé que parece un chiste dada la enorme fragmentación, pero no deja de ser un buen consejo para quienes menos conocen de smartphones. Si ves una actualización lo mejor es que la instales.
La capa personalizada de tu móvil es otro factor importante
No todos los modelos se comportan igual, incluso aunque tengan idéntica batería. Hay marcas con una personalización que termina lastrando al terminal consiguiendo que se agote antes; otras consiguen lo contrario; y luego está Android puro, que debería de ser el que menos consume. No tiene por qué ser así.
Android puro no tiene por qué consumir menos: hay capas que gestionan mejor los recursos
Por experiencia propia diría que las capas de Xiaomi y de Huawei son las que más autonomía obtienen en líneas generales. No quiere decir que se aplique a todos los modelos, pero sí es algo que he notado. También los móviles directos de Google obtienen un excelente rendimiento en autonomía: el Pixel 2 XL se está portando muy bien.
En la línea contraria diría que está Samsung. No quiero decir que solo por ser de esta marca la batería dure menos, pero sí que posee un exceso de software con aplicaciones en segundo plano que se ejecutan queramos o no. El Galaxy S8+ o el Galaxy Note 8 obtienen una autonomía decente, eso sí. Que no superior.
¿Cuántas aplicaciones tienes instaladas?
Otra obviedad que debe quedar reseñada en este artículo. Cuantas más aplicaciones instales más batería gastarán ya que una buena cantidad de ellas se ejecutan en segundo plano consumiendo energía. Las redes sociales son especialmente insaciables, sobre todo Facebook.
Hacer una buena limpieza de apps siempre da buenos resultados. Elimina las que no uses, accede a pensarte las que tengas más dudosas y mantén las imprescindibles. Y vigila los juegos freemium de gestionar recursos: la ejecución en segundo plano de los contadores y notificaciones consume bastante batería.
Lo mejor es que lleves un control mediante el gestor de batería integrado en tu Android. Accede a los ajustes, entra en «Batería» y, después, en «Uso de batería». Verás qué apps devoran mAh como si estuvieran delante de un pastel de chocolate. Y un último consejo: no instales JAMÁS aplicaciones de optimización ni «task killers».
El tamaño de la pantalla y su resolución, determinantes
La pantalla es lo que más consume de cualquier smartphone. No es extraño ya que la retroiluminación devora batería, por lo que la autonomía se reduce conforme aumentan las pulgadas de diagonal. No solo eso: la resolución influye.
La resolución es la cantidad de píxeles activos en la superficie de la pantalla. Ergo, si tienes más píxeles que encender, el móvil gastará más batería. ¿Quieres ahorrar en consumo? Full HD y no más allá de las 5,5 pulgadas. O 5 si me apuras. Por más que esto sea cada vez más difícil…
Y sí: el tamaño importa
Decía al principio que no es determinante, pero no cabe duda de que guarda su importancia en el cómputo global del gasto energético. Ten en cuenta las variables anteriores y elige tu móvil con el máximo de mAh posible. Lástima que los fabricantes no apuesten por el diseño y la autonomía ya que en los móviles delgados apenas vemos más allá de 3000 mAh.
¿Te parece suficiente la autonomía de tu smartphone? Conseguir que dure más creo que es un punto destacable dentro de las valoraciones a tomar antes de una compra. También la carga rápida, ojo: si tu batería se gasta pronto que también se cargue pronto. Algo es algo…