La seguridad en nuestras casas cada vez es algo que preocupa a más personas. Por un lado está el problema de la okupación, y por otro el ingente aumento de viajes y salidas que los españoles llevan a cabo. Las salidas a comer, escapadas de fin de semana, viajes internacionales... parece que en España es raro ya estar un fin de semana en casa.
Por eso, ha aumentado el uso de cámaras de seguridad, de contratación de sistemas de alerta conectadas a la policía, etc. Pero hay más formas de proteger la casa, más allá de vigilarla. Se puede hacer que parezca que hay gente en casa incluso cuando no es así, haciendo más difícil a los ladrones que elijan una casa para robar.
Para ello se necesitan algunos dispositivos, no especialmente caros, y alguna aplicación de control de los mismos. O, mejor dicho, de programación. En este caso se ha usado Google Home, aunque se podría hacer con Alexa, Home Assistant u otros sistemas de control domótico.
Los dispositivos
Como es lógico, el simular que hay gente en casa requiere de un cierto hardware, que no es especialmente caro. Se trata de dispositivos domóticos como altavoces o lámparas, pero también se pueden usar cosas que ya estén en casa por otros motivos, como una aspiradora inteligente o la propia televisión.
Mención especial a los altavoces inteligentes, que normalmente se usan como método de entrada de comandos, con órdenes de voz, pero que en este caso se usarán como métodos de salida, para poner música, podcasts, etc. Así pues, buscando no disparar el gasto se van a crear tres grupos de dispositivos de hardware.
- Luces: La forma más obvia de simular que hay gente en casa es encender las luces. Para ello se pueden usar dos tipos de dispositivos, las bombillas inteligentes o los enchufes inteligentes. Estos últimos son más versátiles si se quieren controlar lámparas que no son compatibles con ciertas bombillas.
- Sonidos: Otra forma de simular que hay gente en casa es hacer que se reproduzcan sonidos. La forma más sencilla es poner música en ciertos altavoces en la casa a ciertas horas. También es buena idea reproducir las noticias o podcasts, porque la conversación es más parecida a la de personas dentro de la casa. Para ello se necesitaría un altavoz como mínimo, en el caso de este ejemplo compatible con el asistente de Google, pero podría hacerse lo mismo con Alexa. El precio de los más sencillos no llega a los 30 euros, algo que trataremos en el siguiente apartado, por lo que el desembolso no es especialmente grande.
- Otros: También se pueden usar dispositivos que se tengan en casa por otros motivos para activarlos y apagarlos de forma programada y remota. Un buen ejemplo es el televisor, que se puede programar con dispositivos como los de Broadlink. También entran en este apartado las aspiradoras inteligentes, que se pueden programar para realizar rutinas de limpieza a ciertas horas, aunque no haya nadie en casa.
La aplicación
Como se ha mencionado antes, la aplicación que se usará es Google Home, aunque hay otras alternativas. En este caso habría que crear rutinas basadas en las horas que se prefieran para simular la presencia en casa. Es posible, no obstante, crear varias rutinas, quizás unas con sonido en las horas diurnas y unas con luces en las nocturnas. La creación de rutinas es muy sencilla, y se puede hacer siguiendo estos pasos:
- Seleccionar la opción Automático de la barra inferior de opciones.
- Pulsar en el botón Añadir+.
- Seleccionar uno de los dos tipos de Rutina, Casa o Personal, en función de si se quiere compartir o no el control de la misma.
- Poner un título a la rutina.
- Seleccionar Activadores.
- Pulsar en A una hora específica.
- Seleccionar la hora y los días de repetición.
- Pulsar en Añadir activador.
- Seleccionar Añadir Acción.
- Pulsar en Ajustar los dispositivos domésticos.
- Seleccionar el dispositivo.
- Seleccionar la acción a ejecutar.
- Pulsar en Añadir Acción.
Esto habría que hacerlo con cada uno de los dispositivos que se quieren configurar. Lo ideal es configurar diferentes horas para diferentes días, de manera que no sea lógico deducir un patrón. Por ejemplo, si se está una semana fuera poner los días pares con una rutina y los impares con otra.
El coste
Como es lógico, el uso de estos dispositivos implica un coste, pero no es especialmente alto, y seguramente muchos estén ya en casa si la domótica es algo que interese. Por menos de 100 euros se pueden comprar un par de bombillas inteligentes (15 euros), un pack de enchufes conectados (22 euros) y un par de altavoces básicos (50 euros), que además sirven como controlador de una TV mediante infrarrojos.
Una fecha como Black Friday suele ser buen momento para adquirir estos aparatos en el caso de qque no se tengan ya en casa o de que falte alguno para crear este tipo de rutinas. En Amazon en ese día (o semana en los últimos años) se ven fuertes rebajas, de incluso un 50% en algunos productos.
Por supuesto, este ejemplo de configuración puede ser mucho más completo y costoso, pero lo más interesante es que son dispositivos que ya están en muchas casas para funciones normales, como iluminar o poner música. Normalmente, no hay que comprarlo todo de forma expresa para esta tarea. De igual modo, si la seguridad importa mucho no es mala idea complementar esto con algún sistema de cámaras de vigilancia, sea de exterior o de interior, o incluso una puesta en un timbre inteligente.