Somos muchos los que hemos recibido nuevos gadgets estas navidades.Entre tablets y smartphones, seguro que en muchos casos es una renovación, en vez de una nueva adquisición. Para todos esos casos, nos queda el viejo smartphone o tablet, en mejor o peor estado, al que podemos darle nuevos usos.

Podríamos por ejemplo usarlo como centro multimedia y transformarlo en un Chromecast, o regalarlo a algún amigo o familiar que tengan un modelo inferior, o incluso venderlo y con ello financiar la nueva adquisición, asegurándote que el nuevo propietario no vea ni note que ese smartphone ha sido usado por nadie. Opciones hay muchas, y muchas más.

En cualquier caso, lo mejor sería limpiar el antiguo dispositivo y dejarlo listo para su nueva finalidad. Vamos a ver como podemos realizar este proceso, que en realidad es muy muy sencillo.

Los últimos momentos antes del adios

Antes de enzarzarnos con la restauración, debemos considerar el paso previo, y quizá más esencial para nosotros, como es la copia de seguridad. No hay que olvidar que todo lo que hay en la memoria interna del teléfono se borrará, incluidas fotos, vídeos y cualquier otro contenido multimedia que hayamos descargado, por ejemplo. Por ello es importante asegurarnos que lo recogemos todo. Para hacerlo tenemos muchas opciones.

Por un lado, si disponemos de microSD en nuestro terminal, lo podemos usar para copiar las fotos en esa memoria, y luego extraerla para guardar el contenido en el ordenador. Para ello solo necesitaremos un explorador de archivos.

En el caso de no tener almacenamiento externo, o de no querer usarlo, existen muchos otros métodos para hacer nuestra copia de seguridad. Podemos pretender hacer una copia solo de fotos con SnapPea PhotoSnap, o una copia completa de todo el sistema y su contenido con OBackup, o incluso copia de cada una de las partes mediante las propias aplicaciones de Google.

Restaurar un Android a su estado inicial

Para limpiar un Android de todo nuestro paso por él no necesitamos aplicaciones adicionales, y ni siquiera preparación previa.

• Paso 1. Nos dirigimos a los «Ajustes» de Android. Según el fabricante, la organización aquí puede ser distinta. En un Android puro buscaremos la sección «Personal» y en ella «Copia de seguridad». En otros casos puede estar en la sección «Seguridad».
• Paso 2. Antes de hacer el borrado, podemos establecer la última copia de seguridad de Google en nuestra cuenta. Se guardará la lista de aplicaciones descargadas, contraseñas de Wi-Fi y más ajustes del sistema. Toda esta información es la que se restaura automáticamente al entrar con nuestra cuenta de Google en un nuevo dispositivo. Es bastante recomendada, ya que ahorra sobretodo tiempo en buscar todas las aplicaciones que siempre usamos, aunque también es posible que en el nuevo dispositivo nos sobre alguna y luego la eliminemos.

• Paso 3. Pulsamos sobre «Restablecer datos de fábrica». Aquí nos aparecerá una última pantalla de resumen con toda la información que vamos a eliminar, incluidas todas las cuentas asociadas al dispositivo.  Revisemos todo esto y aseguremos que tenemos guardado lo que nos interesa antes de pulsar «Restablecer teléfono» al final de la pantalla, porque ya no habrá vuelta atrás.
• Paso 4. Se iniciará el proceso de borrado, que no tarda demasiado tiempo y el teléfono se reiniciará. Es recomendable de todas formas que tengamos más de un 50% de batería, para evitar problemas que puedan surgir.

Después de este proceso tan sencillo ya tendremos un Android como nuevo. No se habrá restablecido la versión de Android a la original del dispositivo, eso no, pero al iniciar se cargará el proceso de registro de cuentas y de configuración del dispositivo. Lo recomendable sería no hacer ninguno de estos pasos, y apagar el dispositivo, porque la persona que reciba el dispositivo querrá encontrarlo como nuevo y realizar él mismo todos estos pasos.

Recordad extraer la tarjeta SIM y/o microSD antes de perder de vista vuestro antiguo compañero de viaje. Como habéis visto, el proceso es tremendamente sencillo. Existen otros, como realizar wipe desde el recovery, pero este proceso es el más básico y útil para la mayoría de usuarios. Y si no se os ocurren usos para este viejo dispositivo, aquí os hicimos un recopilatorio de ideas.

Un Android nunca deja de ser útil.