Al cabo del tiempo, nuestros dispositivos se ralentizan. Es inevitable, y el mantener tu móvil es una de las tareas que debes hacer con él en el día a día. Si bien es cierto que se puede paliar, muchos no saben los rituales que se han de llevar a cabo para ello.
Hoy os damos 5 rituales que debéis seguir cada cierto tiempo para poder tener vuestro teléfono lo más estable posible. Y como algunos habréis adivinado, en última instancia y como último recurso está la opción de formatear. Aunque eso lo explicaremos más adelante.
Limpiar la caché de tu móvil (cada cierto tiempo)
Ya lo hemos dicho en un par de ocasiones: el que el borrar la caché sea algo tan extendido no es malo, pero sí engañoso. Muchos se valen del miedo de los usuarios porque sus caros teléfonos puedan ralentizarse, y nada más lejos de la realidad. El problema de borrar la caché os lo explicamos en un artículo cuya lectura os recomendamos.
La cuestión es que sí es cierto que hay que borrar la caché de vez en cuando. No pasarse, como decimos, ya que eso podría provocar más fallos que ventajas. Pero de vez en cuando deberías pasarle un limpiador a tu teléfono. Pero no cualquiera; te recomendamos CCleaner, uno de los pocos que no intenta engañarte con soluciones milagrosas.
Reiniciar tu teléfono (a menudo)
Muchos fabricantes incluyen entre sus consejos, al menos, reiniciar el móvil una vez por día. No pensamos que sea necesario reiniciar el móvil cada 2 horas, pero sí que sería idóneo que reiniciaras tu teléfono al menos una vez cada par de días, o por lo menos, cuando vieras que se le va un poco «la olla».
A veces, de tanto funcionar de seguido, el sistema de nuestros móviles se vuelve un poco majareta y un reinicio lo espabila un poco. Esto se nota más cuando tenemos durante bastante tiempo el sistema sin ningún tipo de modificación o cuidado, por lo que reiniciarlo de vez en cuando es más que bueno.
Repasa los ajustes de vez en cuando
Tal y como explicamos en el artículo de ahí arriba, muchas veces bucear en los ajustes es beneficioso para encontrar funciones ocultas que nos pueden venir bien o cambiar algo que no nos guste como está. Esto también atañe a los ajustes de optimización, de batería, etcétera.
Esto nos ayudará a revisar qué está bien y qué está mal en nuestro teléfono. No sería la primera vez que una función de nuestro propio móvil entorpece su funcionamiento. Por lo tanto, esto consigue que estemos blindados por si acaso nuestra versión de Android o capa personalizada nos hacen alguna de las suyas.
Desinstala apps que no uses
Aunque parezca sorprendente, en Android tenemos una patología curiosa: instalamos aplicaciones para usarlas una vez a lo sumo. ¿No te ha pasado de ir alguna vez a algún restaurante y para usar sus ofertas te has descargado su aplicación? ¿Qué pasaba con esa app?
Muchas veces cuando vamos a revisar las apps instaladas en nuestro sistema vemos cosas que llevan ahí la tira de tiempo. No estaría nada mal revisar tus apps de vez en cuando y borrar las cosas que sabes que no vas a usar. Quién sabe, he llegado a ver a gente que tenía apps instaladas de hacía años y que no usaba…
Último recurso: formateo
Este último consejo, como hemos repetido en multitud de ocasiones, se debe hacer como último recurso. Lo subrayamos debido a que este proceso involucra datos personales y posibles fallos del dispositivo, y se debe hacer con el mayor de los cuidados y el cuidado más delicado que se deba.
Muy de vez en cuando, quizás una vez cada año o cada cierta cantidad de meses (varía en función del estado del teléfono) hemos de formatearlo. Así limpiamos a fondo el sistema de morralla y lo dejamos funcional como si estuviera recién salido de la caja. Y no es difícil, tenemos muchos tutoriales para realizarlo en El Androide Libre.
Como decimos, está bien hacer esto cuando notemos (de verdad) que nuestro dispositivo está funcionando indebidamente. Y recuerda: haz una copia de seguridad de tus datos y restablécela cuando acabes para mantener tu teléfono justo como a ti te gusta.