Google Chrome es el navegador más utilizado en España y en otras partes del mundo, y no es de extrañar, teniendo en cuenta que integra grandes ventajas. Algunas de las más útiles son su buena gestión de las pestañas abiertas y los favoritos o su gran velocidad de navegación, aunque lo cierto es que tiene bastantes posibilidades.
Además de esto, Google no deja atrás el apartado de la privacidad y la seguridad, y también ha puesto en su navegador un apartado llamado Guía de privacidad, desde el que se pueden modificar varias opciones relativas a la seguridad a la hora de navegar, haciendo que las webs que el usuario visita puedan estar más seguras.
Y es que, hay ocasiones en las que parece que absolutamente cualquier web sabe dónde has navegado antes, y esto hace que aflore una sensación de estar vigilado, algo que se puede remediar desde el móvil fácilmente. Google se deja fuera de este apartado otras opciones de privacidad, pero es cierto que aquí recoge algunas de las más útiles.
Revisión de privacidad
Google Chrome cuenta con diversas opciones para modificar el comportamiento del navegador y dejarlo al gusto de cada uno, ya sea a nivel estético o funcional. En este caso, la llamada Guía de privacidad incide en lo segundo. Para acceder a ella hay que abrir Configuración, pulsar sobre Privacidad y seguridad y luego sobre Guía de privacidad. Esto abrirá una serie de pantallas en las que el navegador da elegir al usuario sus preferencias.
La primera página explica la función de Mejorar las búsquedas y la navegación. Cuando está activada, la app funcionará, teóricamente, a una mayor velocidad, puesto que Google tendrá en cuenta las páginas que se visitan con más frecuencia para predecir los sitios que vas a visitar a continuación, y también habrá mejores sugerencias al escribir en la barra de búsqueda. Sin embargo, para ello, es necesario compartir con Google el historial.
Opciones Google Chrome
Por otra parte, se ofrece la posibilidad de elegir entre una navegación con protección estándar o con protección mejorada. La primera detectará eventos peligrosos y advertirá al usuario sobre ellos, incidiendo lo mínimo en los datos del usuario. La mejorada compartirá algunas de las páginas que visitas con el apartado de Navegación segura, vinculando esos datos de manera temporal a la cuenta del usuario.
La última de las configuraciones que ofrece Google es un bloqueador de cookies de terceros, que hará que los sitios no puedan utilizar sus cookies para rastrear la actividad del usuario y ofrecerle publicidad dirigida, entre otras cosas. Se puede elegir entre bloquear este elemento siempre o únicamente cuando se navegue en modo de incógnito. Este es el último paso que hay disponible en la revisión de privacidad de Google, y lo cierto es que aunque la compañía tenga más opciones, se trata de una buena implementación, que permite los usuarios revisar en poco tiempo algunos ajustes importantes sobre los cuales además se explica el funcionamiento.