No se concibe ni se entiende la historia del Real Madrid sin la figura de Florentino Pérez. Con su labor en dos mandatos diferentes y bajo un largo periodo de tiempo, el mandatario se ha convertido seguramente en el presidente más importante de la historia de la entidad junto a Santiago Bernabéu tal y como reflejan los hechos.
Enumerar la lista de títulos conseguidos durante el tiempo que ha estado al frente de la entidad supone recopilar una larga lista de éxitos entre los que se encuentran 6 Champions League, 6 Mundiales de Clubes, 6 Ligas o 3 Copas de Europa de Baloncesto. Pero además de los triunfos deportivos, la gestión del actual presidente va mucho más allá y ha ido convirtiendo al Real Madrid en una referencia a todos los niveles en todo el mundo.
Por eso, los socios han querido reconocer su gestión y han decidido poner el nombre de Florentino Pérez a la Ciudad Deportiva. Ciudad Real Madrid Florentino Pérez pasará a ser a partir de ahora la denominación de este emplazamiento que, curiosamente, fue una de sus grandes primeras obras al frente de la entidad.
Pese a que algunas voces llegaron a pedirlo hace tiempo, siempre se negó Florentino Pérez a que el nombre del estadio Santiago Bernabéu se cambiara. Eso era y es intocable. Pero se mostró abierto a otras opciones, y los socios encontraron en la Ciudad Deportiva el sitio perfecto para llevar a cabo esta petición.
Es todo un punto neurálgico del Real Madrid, el lugar en el que se forjan las futuras grandes estrellas y donde conviven en el mismo lugar con los cracks del momento. Las categorías inferiores, el primer equipo, el conjunto femenino y la sección de baloncesto pisan por allí los siete días de la semana, así que el emplazamiento de Valdebebas es el mayor hogar del madridismo.
Una obra que crece
Bajo el mandato de Florentino Pérez el 12 de mayo de 2004 se puso la primera piedra de la nueva Ciudad Deportiva del Real Madrid. Pocos se imaginaban que aquellos terrenos en Valdebebas iban a adoptar tanta importancia dentro del día a día del club hasta convertirse en lo que son actualmente.
Aquel acto simbólico da buena cuenta de lo que cuida el Real Madrid este tipo de detalles. Un mito como Alfredo Di Stéfano y un por entonces jovencísimo Dani Carvajal, que era todo un crío, pusieron la primera piedra del proyecto. Dos generaciones totalmente diferentes, una de las figuras más importantes del fútbol y otra que iba a terminar siendo un jugador de referencia en muchos títulos del club blanco.
Las obras avanzaron y el 30 de septiembre de 2005 se inauguró la Ciudad Real Madrid. Sin embargo, aquel recinto no ha parado de crecer hasta la actualidad y Florentino Pérez ha seguido ampliando las instalaciones hasta convertirlas en una de las mejores ciudades deportivas del mundo.
1.200.000 metros cuadrados para formar a las perlas de la cantera y para darle todas las facilidades a los profesionales de los equipos masculinos, femenino y de la sección de baloncesto. Un lugar donde "conviven profesionales y aficionados" y "dos familias unidas por un mismo espíritu", como dice el propio club sobre esta obra.
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Esta vasta extensión hace que la actual Ciudad Deportiva del Real Madrid sea 10 veces más grande que la antigua, tenga un tamaño 40 veces mayor que el que ocupa el Santiago Bernabéu y tenga 20.000 metros cuadrados más que la superficie del parque del Retiro en la capital de España.
El Di Stéfano, la joya
La evolución y la inversión en esta extensión hicieron que en 2014 se inaugurara la residencia del primer equipo de fútbol y de baloncesto, una de las más avanzadas de todo el mundo y que cuenta con 57 habitaciones individuales, una piscina cubierta, sala de juegos y de cine.
Existen multitud de campos de entrenamientos con gradas y está la joya de la corona, el Alfredo Di Stéfano. Es el estadio principal con capacidad para unos 6.000 espectadores que alberga los partidos del filial y del conjunto femenino. También llegó la construcción del pabellón de baloncesto, donde entrenan día a día los equipos de esta sección y donde se disputan además los partidos oficiales de la cantera.
Y no sólo eso, sino que en 2018 las oficinas del club se trasladaron a Valdebebas tras la construcción de un nuevo edificio. Con cinco plantas y 14.000 metros cuadrados de superficie, numerosos empleados del Real Madrid desarrollan allí su trabajo, algo que representa la unión de diferentes ámbitos de la entidad en un mismo lugar.
Es la obra más faraónica de Florentino Pérez al mando del Real Madrid. Una gran inversión que, a la vista está, ha repercutido de manera beneficiosa en los grandes resultados deportivos que ha conseguido el club en las diferentes secciones durante los últimos años.
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Una gestión deportiva que en su día apostó por los Galácticos y que ahora se decanta por jóvenes valores como Vinicius, Rodrygo o Bellingham. Y una manera de gestionar la economía que es la referencia y la envidia de innumerables clubes del mundo. Una figura, la de Florentino Pérez, que ya quedará para siempre con su nombre ligado a la Ciudad Deportiva de la que él fue el padre.