Casi dos meses después de que el Real Madrid lo hiciera oficial, este sábado José Martínez Sánchez 'Pirri' ha sido nombrado como Presidente de Honor del club blanco después de que se aprobara su nombramiento en la Asamblea General Extraordinaria.
A sus 78 años, Pirri ocupa el puesto vacante en el club tras el fallecimiento de Amancio Amaro a finales de febrero de 2023. El ceutí llevaba meses colaborando en la actividad institucional del Real Madrid. La temporada pasada viajó a Glasgow con el equipo para su debut en la Champions League y en abril presidió el sorteo de las entradas de la final de la Copa del Rey, una función que suele estar reservada para el presidente de honor.
De esta manera, Pirri se convierta en la cuarta leyenda que ocupe la Presidencia de Honor del club en el siglo XXI. Anteriormente lo hicieron Alfredo Di Stéfano (2000-2004); Paco Gento (2014-2022) y Amancio Amaro (2022-2023). En el siglo XX también ocuparon el cargo Carlos Padrós, Adolfo Meléndez o Raimundo Saporta.
[El Real Madrid aprueba un presupuesto de 940 millones de euros para la temporada 2023/2024]
Florentino Pérez introdujo la propuesta sobre Pirri ante los socios: "Nunca olvidaremos la emoción y alegría de Amancio el día que recogió en esta Asamblea el testigo de Paco Gento como presidente de honor del Real Madrid. Estará siempre en nuestros corazones. Hoy, tras decirle adiós y estarle eternamente agradecido, esta directiva propone a otra leyenda para sucederle: José Martínez 'Pirri'".
"Ha sido un ejemplo dentro y fuera de los terrenos de juego, un símbolo perfecto de este ADN que nos identifica: nunca rendirse y darlo todo hasta el final", le introdujo Florentino. Tras aprobarse su nombramiento por aclamación, Pirri subió al estrado y dejó un emotivo discurso.
La carrera de Pirri
Pirri, leyenda del Real Madrid, completó con la camiseta blanca 16 temporadas, siendo uno de los jugadores de mayor importancia en la década de los 60 y los 70. Ganó 15 títulos: 10 Ligas, 4 Copas del Rey y 1 Copa de Europa, 'La Sexta' del club, en 1966, conquistada con un once titular repleto de jugadores españoles.
Fue 41 veces internacional y en 1980 decidió terminar su etapa en el Real Madrid y recaló en el Puebla de México. Dos años después y tras acabar los estudios de Medicina, regresó a España para incorporarse al cuadro médico del club blanco. Más tarde formó parte del cuerpo técnico del primer equipo.
Además de ser el tercer futbolista que más campañas ha estado en el Madrid y el décimo con más partidos en la historia del club, los valores de arrojo que Pirri transmitía trascienden a los números. Fue un jugador capaz de disputar una final de Recopa con el brazo en cabestrillo debido a una fractura de radio o terminar una final de la Copa de España con fiebre y una clavícula rota durante el mismo encuentro.
Este último hecho, que tuvo lugar ante el Barcelona en 1968, provocó que Santiago Bernabéu le otorgara la primera Laureada, una condecoración al valor heroico: "No fue, como muchos piensan, por jugar con el partido de desempate de una final de la Recopa con el Chelsea con el brazo roto. Esto fue en Atenas. Me rompí el radio y jugué. Pero no me la dieron por este partido. Fue por esa final contra el Barcelona del Generalísimo", reconoció Pirri.