Victoria del Real Madrid en un Clásico muy igualado. El Barcelona Lassa dejó buenas sensaciones en el WiZink Center pudiendo ganar a su eterno rival. De nuevo Llull consiguió la proeza al conseguir una canasta a falta de dos segundos para el final que significó la victoria merengue. Los locales se fueron al descanso con once puntos de ventaja, pero los azulgranasEl Dios Llull tumba al Barça en el último segundo no se rindieron y remaron para luchar en los últimos minutos por conseguir la victoria. Tomic estuvo a punto de convertirse en el verdugo del Real Madrid tras anotar dos canastas que ponían por delante a su equipo a menos de un minuto para el final. (Así vivimos el partido).

El Barcelona comenzó el partido ofreciendo una cara distinta al equipo de los últimos meses. Los de Bartzokas tenían clara la idea de mover rápido el balón para buscar tiros cómodos. Las cosas salían bien para los visitantes tanto en ataque como en defensa. Brad Oleson cumplió la función de parar a Llull a la perfección. Maciulis era el único que salía enchufado de los de Laso con los nueve primeros puntos consecutivos del Real Madrid. Los rebotes ofensivos capturados por el conjunto culé fueron clave para que gracias a las segundas jugadas anotaran puntos en la canasta rival. El Real Madrid demostró lo poco que le hace falta para sumar puntos y con dos jugadas de Randolph y Llull conseguían acabar el primer parcial en tablas.

REMONTADA 

De nuevo el equipo de Pablo Laso salió adormilado en el inicio del segundo cuarto. El Barcelona conseguía abrir un brecha pequeña en el marcador para romper las tablas. Tras un tiempo muerto de Laso, el Real Madrid consiguió un parcial de 8-2 a favor que le ponían por primera vez por delante en el marcador. El perímetro del Barcelona se empezaba a atascar en ataque y ya no tenía la fluidez del primer parcial. El hándicap del bonus a falta de cinco minutos para el final perjudicó a los visitantes que se iban al descanso con once puntos en contra en el casillero, tras un parcial de 24-13.

La segunda empezaba con un nombre propio, Victor Claver. El ex de la NBA decidía convertirse en el líder de su equipo, que luchaba para acercarse en el marcador. Taylor se mostraba fundamental tras frenar a Rice en ataque culé. El equipo de Bartzokas estaba siendo superior al equipo de Laso que tenía que parar el partido. El encuentro continuaba con un intercambio de canastas en ambos lados y favorecía a los visitantes que se quedaban a sólo cinco puntos antes de empezar el último cuarto.

FINAL APRETADO

Los dos equipos estaban muy poco acertados de cara a canasta y el partido se estaba trabando. Los nervios y la tensión de un clásico se notaba en los minutos finales. Felipe Reyes conseguía dos rebotes en ataque y se convertía en el máximo reboteador de la historia de Liga ACB y fue homenajeado en mitad del partido por la afición y su familia. Los azulgranas se ponían a un punto y se veían con opciones de llevarse el partido. Los de Laso se atascaban en ataque y el Barcelona lo supo aprovechar. A falta de 25 segundos Tomic anotaba una canasta que ponía por delante a su equipo. El partido estaba al límite y el Barcelona soñaba con el milagro. La pizarra blanca funcionó y Randolph respondió dejando la última posesión para los culés. De nuevo la bola era para Tomic que ganó el uno contra uno a Ayón y a falta de seis segundos dejaba al Barcelona muy cerca de la victoria. El Real Madrid tenía seis segundos para ganar como más duele al rival con una canasta al final, Sergio Llull acostumbrado a ello no falló y volvió a conseguir una canasta que se recordará.

REAL MADRID 76-75 FC BARCELONA LASSA

Real Madrid: Randolph (9), Maciulis (9), Ayón (6), Llull (16), Taylor (2), Draper (-), Rudy (3), Doncic (4), Carroll (14), Hunter (7), Reyes (6).

FC Barcelona Lassa: Rice (6), Claver (7), Oleson (8), Perperoglou (16), Tomic (14), Favrenai (4), Vezenkov (6), Eriksson (9), Diadné (-), Koponen (3); Renfroe (2).

Parciales: 23-23 | 24-13 | 15-21 | 14-18

Incidencias: Partido correspondiente a la 24 jornada de la Liga ACB. Partido disputado en el Wizink Center (Madrid, España).