El Real Madrid venció con comodida al Retabet Bilbao Basket en un partido donde Sergio Llull hizo lo que quiso y cuando quiso. El de Mahón fue un auténtico dolor de cabeza para la defensa del Bilbao, que era incapaz de frenar el ritmo anotador del base, que a base de triples sentenció el partido a mediados del tercer cuarto. Junto a Llull, gran partido de Carroll (25 puntos) y de Felipe Reyes (15 puntos), que mostraron su versión más acertada en mucho tiempo. (Así vivimos el partido en directo)

El partido comenzó con un alto ritmo en ataque aunque con ambos equipos poco acertados de cara a la canasta. Los triples de Tabu y Lapornik daban la primera ventaja al equipo visitante. Tres triples consecutivos de Llull volvían a levantar al público de sus asientos y ponían al equipo local por delante en el casillero. Carles Durán tenía que parar el partido para frenar la racha del base del equipo blanco y mantener a su equipo dentro del partido. En el primer cuarto los ataques se imponían a las defensas y el equipo de Laso se mostraba cómodo con el ritmo de partido que le estaba dejando marcar Retabet Bilbao.

Los hombres de negro sabían que sus opciones en el partido pasaban por aumentar la intensidad en la defensa. Los ajustes defensivos empezaban a dar sus frutos frenando el ataque de los locales que se atragantaban a la hora de sumar puntos. Laso ampliaba las rotaciones y entraba a pista el joven Álex Suárez que no está disputando muchos minutos en la presente temporada.  Unas buenas últimas defensas permitían al equipo blanco irse con una ventaja en el marcador de siete puntos al descanso.

LA DUPLA PERFECTA

Randolph empezaba a encarrilar al Real Madrid con ocho puntos consecutivos. Los de Laso no querían sustos como en sus últimos partidos y cogieron la directa con un parcial de 11-0 a favor de los locales que dejaban la mayor renta del partido con 18 puntos de ventaja. El tiempo muerto de Carles Durán daba sus frutos y conseguía devolver un parcial de 8-0 para volver a soñar con dar la sorpresa. Entonces volvió a aparecer Llull con otros ochos puntos para llevar su actuación individual hasta los 29 puntos. Los visitantes dejaban ir el partido y la proeza  de ganar en el feudo blanco se esfumaba.

VICTORIA ENCARRILADA

El último parcial comenzó de la mejor manera para el equipo local con triples y robos que ponían hasta 25 puntos por delante al conjunto de Laso que sentenciaba el encuentro a seis minutos para el final. Carles Durán paraba el partido para intentar maquilar el marcador y lavar la imagen del equipo. Los últimos minutos fueron un trámite para ambos equipo en un partido que llegó sin emoción a los minutos finales.