Ganar era obligatorio- Con esa premisa se plantaba el Madrid en Grecia. Ante el segundo clasificado, un público caliente y la vuelta de un jugador fundamental como Spanoulis. Contra todo ello, sumado a las lesiones, tenía que luchar el equipo de Pablo Laso.(Así vivimos el partido en directo).

El cuadro merengue se vio superado con claridad en el primer cuarto. No solo por el resultado, sino por sensaciones. Ni rebotes, ni triples, ni defensas. Solo había errores. Olympiacos buscó el interior de la pintura y encontró su camino en Milutinov. Ayudaban los madridistas cometiendo faltas estúpidas lejos de la pintura, cargándose tanto Thompkins como Tavares. Taylor, que volvía de su lesión, daba la cara ante un 'pequeño' Spanoulis mientras Tavares sacaba cierto petróleo de su altura. Sin embargo, los griegos supieron dar ese paso para romper el partido. El ataque del Madrid se nublaba y con un 0/5 inicial en triples terminó con el marcador en 18-8.

Mucho mejor, aunque dentro de lo peor, fue el segundo tiempo. Carroll y Randle fueron las soluciones de Pablo Laso a los ataques estáticos que estaba generando el Madrid. Ambos suplieron el coladero de rebotes en el que se convirtió el cuadro visitante. Doncic también apareció, así como un Thompkins que empezó, por fin, a capturar los rebotes que se le pedían. La reacción no se consumo pero un lanzamiento sobre la bocina de Jaycee Carroll sumó tres puntos -un total de nueve- importantísimos para el 34-30 del descanso.

ATISBO DE REMONTADA

Inicio completamente loco tras la charla en los vestuarios. Los primeros protagonistas fueron Tavares y Milutinov, quienes hicieron suya la zona rival en los primeros ataques del tiempo. Rápidamente cedieron el mano a Doncic y Papanikolaou, enchufados ambos desde el perímetro. Cuando el Real Madrid parecía remontar la situación, Olympiacos reaccióno e hizo valer la diferencia del marcador. El +9 se hizo muy grande al equipo de Laso. Sufriendo en la pintura y sin acertar lo suficiente desde el triple, los griegos se afianzaron.

CARÁCTER MERENGUE

Todo parecía perdido. Tres tiros por falta de Rudy y posterior técnica al balear. El desastre se instauraba en el lado blanco. A cinco minutos del final, y ya con Radoncic en pista, Laso buscaba soluciones con una defensa zonal. Ahí aparecieron Doncic y Carroll. Sobre todo el segundo, héroe desde el perímetro. Pero el dichoso rebote seguía poniendo piedras en el camino de la remontada. Con Thompkins y Tavares eliminados, solo quedaba creer en el milagro. Este vino desde la mano de Carroll. Empate desde el triple y prórroga.

LOS ÁRBITROS, FACTOR DETERMINANTE

Fueron los colegiados quienes decantaron la balanza del lado local. Sus polémicas decisiones a la hora de señalar faltas en un lado y otro de la cancha crispó al banquillo merengue. Reyes, que también fue expulsado, recibió una técnica que mataba el partido. Además, esa diferencia de centímetros la hizo valer Printezis, activo también en el triple. El Madrid luchó hasta el final y dio una actitud para recordar. Carroll con 24 y Doncic con 33 fueron los mejores en una anotación muy individualizada dentro del equipo de Laso. Derrota de campeón que, sin embargo, deja octavo al equipo.

OLYMPIACOS 92-83 REAL MADRID

Olympiacos:  Spanoulis (7), Roberts (4), Papanikolaou (14), Printezis (21), Milutinov (12) -cinco inicial- Mclean (12), Wiltjer (2), Thompson (5), Strelnieks (15), Bogris (-), Mantzaris (3).

Entrenador: Ioannis Sfairopoulos.

Real Madrid: Campazzo (0), Doncic (33), Taylor (2), Thompkins (6), Tavares (8) -cinco inicial- Carroll (24), Maciullis (0), Radoncic (0), Rudy (3), Randle (3), Reyes (4), Causeur. (0)

Entrenador: Pablo Laso.

Árbitros:.Pukl, Belosevic, Mogulkoc.

Parciales: 18-8 | 16-22 | 22-17 | 16-25 | 20-11

Incidencias: Partido correspondiente a la undécima jornada de Euroliga que se disputó en el Pabellón de la Paz y la Amistad (Atenas).