Había que calmar el hambre. La derrota ante Fenerbahçe dolió y más teniendo en cuenta el agotamiento físico que conllevó. Menos de 48 horas después, Burgos buscaba el asalto en una situación complicada. Luchando por alejarse lo máximo posible de los puestos de descenso y con un Madrid resabiado. (Así vivimos el partido en directo).

Tal cual se esperaba sucedió. 19-5 de parcial en los primeros cinco minutos comandados por un Yusta que fue el líder del primer cuarto. Un total de 11 puntos, más todo el trabajo en defensa que suele realizar, le permitían llevarse la ovación del WiZink Center. Epifanio buscaba una presión para evitar las envestidas merengues, pero el resultado fue ínfimo. El Madrid se gustaba y lo demostraba en el luminoso. Tavares en defensa y Campazzo metiendo el ritmo habitual -más cuatro puntos seguidos- rompían de nuevo el partido. Solo Thompson en la pintura podía replicar. 28-13 y diferencia clara.

El segundo cuarto fue más de lo mismo. Fiesta en la grada con los más de 1.500 aficionados de San Pablo Burgos pero no tanto en la pista. Sebas y Schreiner plantaban un 0-4 inicial que respondía Reyes. Imparable el capitán en la pintura. En apenas tres minutos Burgos reaccionó levemente: 32-20. Pero con Carroll en pista, la velocidad aumentaba. 53-31 y clara comodidad de un Madrid que no sufría y que rotaba continuamente.Para más inri, los visitantes perdían por lesión a Martínez.

EL WIZINK SE TIÑE DE AZUL

En el tercer cuarto estalló todo el ejército azulón desplazado a Madrid. Su equipo estaba dando la cara y soñaban con la remontada. Huskic, sobre todo, fue el que encabezó ese levantamiento. Seis puntos muy encadenados en la pintura para irse hasta los 13. Además, el Madrid se iba del juego ante la presión. Llegaba la antideportiva y el 62-51 que paraba Laso. Buena pausa para frenar un aluvión que parecía no tener fin. Campazzo con un triple y Reyes en la pintura devolvían la calma y el 70-53. Mucha respuesta merengue -en gran parte con Randolph- no frenó el ímpetu visitante.  75-59 y el partido no estaba muerto.

CARROLL SE CALIENTA EN PLENA FIESTA

Diez puntos en los primeros seis minutos de juego. El de Wyoming apareció justo cuando se le necesitaba. Burgos se metía de nuevo en el partido con un gran acierto en el triple de Schreiner y López. La barrera de diez puntos, sin embargo, se mantenía intacta. Había más opciones por la grada que por el juego. Y es que, aunque la afición burgalesa achuchara como si del Coliseum se tratase, la realidad era otra diferente. El +11 parecía imposible de romper y más con un Madrid jugando a medio gas. 87-74 gracias a Jaycee y partido más calmado para los 3:20 restantes. El resto fue historia: Burgos intentando dejar la mejor imagen posible y el equipo de Laso calmando el juego a su antojo. Buen triunfo y fiesta en la grada que quizá fue clave a la hora de dar mayor interés a lo que sucedía en el parqué.

REAL MADRID 96-81 SAN PABLO BURGOS 

​Real Madrid: Campazzo, Doncic, Causeur, Randolph, Tavares --posible cinco inicial-- Carroll, Taylor, Yusta, Reyes, Radoncic, Rudy, Ayón.

Entrenador: Pablo Laso.

San Pablo Burgos: Fischer, Jenkins, Thompson, Huskic, Martínez --posible cinco inicial-- Schreiner, Vega, Sáiz, Álex López, Barrera.

Entrenador: Diego Epifanio.

Árbitros: Martín Bertrán, Caballero, Munar.

Parciales: 28-13 | 25-18 | 21-28 | 22-22

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 21 de ACB que se disputó en el pabellón WiZink Center (Madrid).